Óscar Murillo5 min lecturaA diferencia de otros años, cuando el mercado estival en España se adentraba en el mes de septiembre, la ventana de transferencias en las cinco grandes Ligas de Europa abrochará en 2024 el próximo viernes 30 de agosto, a las 23:59 horas en lo que a LaLiga se refiere. Y, aunque bien es cierto que las jornadas finales albergan un sinfín de movimientos, la mayoría a la desesperada, apenas quedan cinco días completos, razón por la que las partes implicadas dibujan un escenario sin cambios bajo los palos del Real Betis. Con dos de los tres guardametas (Adrián San Miguel y Fran Vieites, este último baja en Vitoria por unas molestias en la espalda, lo que propició la citación del jovencísimo Manu González) inéditos aún, Rui Silva volvió a ser titular en Mendizorroza frente al Deportivo Alavés, una muestra de la confianza de un Manuel Pellegrini que no auguraba más salidas ni entradas cuando se oficialice lo de Vitor Roque.
Eso es lo que le transmiten desde los despachos de la dirección deportiva, ya que, si bien hay sondeos y propuestas embrionarias por varios componentes del vestuario (Rodri Sánchez, Assane Diao, Youssouf Sabaly, William Carvalho...), nada está lo suficientemente avanzado como para que se intuya un desenlace en cuestión de horas. Además, si bien en algunos casos no se consideraría necesario buscar un recambio en el mercado, sí sería indispensable en caso de que el meta luso se marchase, con todas las miradas puestas en Álvaro Valles. Con el rinconero está todo acordado a partir de 2025, derivando en un precontrato que podría articularse ya de ser necesario y que se prolongará seguramente hasta 2029 o 2030, pero no hay ni atisbo siquiera de entendimiento con la UD Las Palmas, que ya rechazó cinco millones de euros y la cesión del de Talayuela. Encima, las noticias desde Lisboa no contribuyen a pensar en ese cambio de cromos.
Y es que, tras rechazar el primer acercamiento de 'Las Águilas', que pretenden suplir al lesionado Anatoliy Trubin bajo la fórmula de la cesión con opción de compra, parece que los encarnados están centrados en contratar al delantero turco-suizo Zeki Amdouni, pero lo está costando que el Burnley acepte su puja de ocho millones fijos y dos en variables, habida cuenta de que desembolsó 18,6 hace un año para reclutarlo del Basilea. Los fondos en Da Luz no son demasiados, tras gastar este verano 41,5 millones en Pavlidis, Rollheiser, Beste, Álvaro Fernández y Renato Sánchez, éste cedido, mientras que Barreiro aterrizó a coste cero. El Benfica no dispone de demasiado 'cash', mientras que la dolencia de su cancerbero titular, por el que pagó 10 millones hace un año, no es del todo grave (un esguince de tobillo), por lo que lo espera tras el parón. Así, la segunda propuesta al Real Betis podría ser un préstamo remunerado (en torno al millón) con ODC.
En este sentido, aunque pueda hacer caja por otros futbolistas como Rodri (con el RCD Mallorca muy interesado), en Heliópolis habrían de reunir no menos de seis millones para convencer a los amarillos por Valles, por lo que no tendría demasiado sentido dejar marchar en condiciones nada ventajosas a tu portero titular. 'Off the record', tampoco ilusiona en demasía a Rui Silva el citado movimiento. Más allá de lo grande que es el cuadro lisboeta, la posibilidad de disputar la Champions League y de reunirse de nuevo con su familia, el de Maia estaba más predispuesto al Oporto, aunque últimamente han decrecido las opciones de venta de Diogo Costa a la Premier League, 'conditio sine qua non'. Esa teórica operación sí insuflaría mucho efectivo a las depauperadas arcas de Do Dragao, con la posibilidad de que 6-7 millones fueran en dirección a La Palmera. Hay más clubes interesados, pero pocos que mediten dar un paso de esa magnitud a día de hoy.