El merecido triunfo del Betis ante el Atlético de Madrid vino a poner en valor una vez más la competitividad de todo el bloque. De la mano de Pellegrini, el conjunto verdiblanco se ha reinventado tras el parón para hacer frente de forma coral a la importante baja de Lo Celso, que sumada a la de Isco Alarcón dejó al equipo sin ese faro que por suerte no se echa en falta, gracias a la gran respuesta de las alternativas ofensivas planteadas por el 'Ingeniero'.
Así, uno de los futbolistas que ha aprovechado las circunstancias para dar un paso al frente es el 'Chimy' Ávila. El argentino salió en la segunda mitad ante Osasuna por las molestias de Vitor Roque e hizo el gol de la victoria (el segundo en su cuenta personal tras ver puerta en la ronda previa de la Conference League frente al Kryvbas), mientras que este pasado domingo fue la ausencia de Bakambu la que le brindó su tercera titularidad en LaLiga, tras haber partido también en el once frente al Copenhague.
Como hiciera en El Sadar, el ex rojillo no desaprovechó la ocasión y firmó una actuación notable. Realizó un gran despliegue físico y fue clave para complicar la salida de balón colchonera, contagiando la intensidad con la que se empleó en cada jugada a todos sus compañeros. Pero además de su incansable presión, también gozó de llegadas y conectó con sus compañeros de ataque. Por todo ello, la grada del Benito Villamarín coreó su nombre cuando fue sustituido en el minuto 77 por Assane Diao.
De este modo, el rosarino, el más efusivo en la celebración del triunfo, ofrece motivos para hacer dudar a la dirección deportiva, que no veía con malos ojos su salida en el mercado de enero. Sólo hay una ficha libre y se buscan al menos tres fichajes (mediocentro, extremo diestro y delantero), por lo que se necesita abrir hueco en la plantilla y el 'Chymi' era uno de los candidatos dado el papel secundario del que venía gozando en este arranque de temporada.
Como informó días atrás ESTADIO Deportivo, hasta cinco clubes mexicanos valoran la posibilidad de presentarle una oferta al Betis, aunque es el jugador el que tiene la última palabra y todos se encontraban a la espera de su respuesta. También existe la opción de poner rumbo a la MLS de Estados Unidos, pero cabe recordar que el pasado verano ya recibió llamadas de Brasil y México, donde rechazó al América, y también de Europa, con Grecia (Aris Salónica) y Turquía como posibles destinos en los que ganar más de lo que percibe en Heliópolis.
En todos esos casos, el argentino se mostró reacio a salir, apostando por su continuidad para demostrar a todos que no se equivocaron con su fichaje el pasado enero. Lo que ocurra de aquí a primer mes de 2025 definirá si ha cambiado o no de opinión al respecto. Pero su respuesta en estos dos últimos encuentros ha supuesto un golpe sobre la mesa para confirmar su valía.