Óscar Murillo3 min lecturaAunque el Real Betis ha cerrado la incorporación de Antony Matheus dos Santos, que volará a Sevilla esta misma semana, en cuanto sus agentes resuelvan una discrepancia económica con el Manchester United, los dirigentes verdiblancos no se jugaron el deseado fichaje del extremo a una sola carta. Como de costumbre (Vitao-Natan, Vitor Roque-Moukoko...), la estrategia en la planta noble del Benito Villamarín pasa por activar dos alternativas para un determinado puesto con el fin de cubrirse las espaldas si el 'plan A' colapsa. Algo que, salvo giro drástico de los acontecimientos, no ocurrirá con el brasileño, cuya salida ha provocado reacciones airadas en tierras inglesas. Un 'peso pesado' de los mancunianos, el otrora central y ahora comentarista deportivo Rio Ferdinand, hizo valer su opinión acerca de los actuales dirigentes de los 'red devils', que pagaron casi 100 millones de euros por el atacante al Ajax hace dos años y medio.
“Si hay gente que está intranquila, las cosas no salen como estaban planeadas y no están felices, eso se contagia. Es como una energía cancerosa y mala. Ahora Antony se va, me dijeron, al Real Betis o a algún sitio así. ¡Que los echen!”, expresó el inglés, que vistió doce años la camiseta roja. No falta razón al otrora zaguero, pues la descomunal inversión del United en los últimos años no se ha visto correspondida con títulos. En lo que va de la 24/25, de Old Trafford han salido 215 millones para fichajes, ingresando menos de la mitad. Con todo, están a punto de vender a Alejandro Garnacho al Nápoles por unos 65 millones, aunque 30+5 irán para el sustituto de Antony, el noruego de ascendencia nigeriana del Lecce Dorgu. Como también está apartado Marcus Rashford, necesitará Rubén Amorim más refuerzos por fuera en ataque. No será por dinero: van casi 900 millones de euros gastados en cuatro campañas y media.
Una de las opciones que manejaba el Real Betis por si no salía la del brasileño, según desvela 'La Gazzetta dello Sport', era Samu Chukwueze, a punto de volver a la actividad tras una lesión muscular. Reclutado por el Milan hace dos veranos por algo más de 21 millones, está teniendo este curso menos minutos de los esperados, aunque los 'rossoneri' se han negado a ceder, como pretendían en La Palmera, al extremo nigeriano, que lleva tres goles y una asistencia en 22 partidos, con poco más de 1.000' en su haber. En la 23/24 presentó números similares (3+3 en 1.380), pese a venir de una trayectoria ascendente con el Villarreal CF, como demuestran sus 13 dianas y 11 pases decisivos en 50 duelos justo antes de cambiar de aires.
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