Metió al Olympiacos de Mendilibar en las 'semis' de la Conference parando tres penaltis... y fastidió a Orta y Fajardo

Los técnicos de Real Betis y Sevilla FC, así como otros miembros del departamento de 'scouting' de varios clubes importantes de España y Europa, echaron el ojo a Konstantinos Tzolakis (21) hace meses, los más avezados en la primavera de 2023, cuando defendió la meta de la selección griega sub 21 en la fase de clasificación para el próximo Europeo de Eslovaquia en 2025, siendo antes importante con los combinados sub 16 y sub 17 del combinado heleno. Llegó al Olympiacos con 15 años procedente de la cantera del Platanias y ha ido escalando peldaños hasta asentarse como titular a las órdenes de José Luis Mendilibar, que le dio la alternativa tras las dos derrotas seguidas, ambas con el veterano Alexandros Paschalakis bajo palos, contra el Maccabi Tel Aviv y el eterno rival Panathinaikos. El de Chania le respondió y ahí sigue, acumulando méritos y pretendientes. Y con contrato únicamente hasta el 30 de junio de 2024.

De 1,93 y 21 años, heliopolitanos y nervionenses tomaron nota de sus condiciones e, incluso, lo han visto ya en directo, la última vez este jueves frente al Fenerbahçe, cuando una exhibición suya en la tanda de penaltis aseguró el pase de los rojiblancos a las semifinales de la Conference League. Tzolakis detuvo tres lanzamientos (a Tadic, Under y Bonucci, éste el que brindó la clasificación) en feudo turco, ratificando su buen momento (sólo cinco goles encajados en seis partidos, cuatro de ellos ganados y sólo uno perdido) y ganándose a buen seguro una oferta casi irrechazable para seguir en El Pireo. Un inoportuno fastidio para los que le siguen la pista, que agradecerán, obviamente, que no haya demasiada competencia y que su pase sea barato, lo que ya es improbable. En los casos de los dos clubes hispalenses, no era un 'plan A', pero sí una oportunidad de mercado muy interesante.

Hay que recordar que Manu Fajardo deberá lidiar este verano, ya con Fran Vieites renovado, con la marcha de Claudio Bravo y las ofertas que prometió a Rui Silva escuchar. Puede, por tanto, que haya que contratar a dos guardametas, escenario en el que se priorizará el reclutamiento de uno más joven y revalorizable (perfil donde encajan Tzolakis y otros detectados por el departamento bautizado como 'Betis Talent') así como otro más curtido. Por su parte, Víctor Orta ha dejado casi lista la continuidad de Örjan Nyland y trabaja en la del canterano Alberto Flores, pero deberá buscar acomodo en su último año de vinculación a Marko Dmitrovic.