Dicen los que entienden un poco de esto que, cuando un equipo gana tras jugar bien pero sigue haciéndolo en los partidos en que sufre y no siempre lo merece, empieza a parecerse a un grande, si no lo es ya. Llega el primer parón de selecciones de esta atípica y comprimida temporada por la inserción entre noviembre y diciembre del Mundial de Qatar, por lo que es el momento de hacer balance. Y el del Real Betis no puede ser mejor. De hecho, literalmente es así, porque los pupilos de Manuel Pellegrini han firmado un arranque liguero para enmarcar y prácticamente sin precedentes. Como refieren las principales cuentas especializadas en estadísticas, solamente existe un parangón para el 21 de 24 heliopolitano, salvando las distancias, pues no se conceden tres puntos por victoria en LaLiga hasta la 96/97. Además, la única referencia es doblemente ilusionante: ganó cinco de sus primeros seis partidos en la competición doméstica de la regularidad en la 34/35, campaña que finalizó con el título de este torneo.
Pero, yendo más allá, no hay un ejercicio con siete triunfos en los primeros ocho compromisos oficiales, contando en este caso el pleno en la Europa League frente a HJK Helsinki (0-2) y Ludogorets (3-2). Incluso en el curso que terminó con el trofeo liguero en las vitrinas del Betis, sólo se pudo firmar un 6 de 8, mientras que en esta 22/23 existe la mácula (dignísima, por la mínima y preñada de orgullo y tuteo al único que no sabe sino vencer, el Real Madrid) del Santiago Bernabéu, porque los verdiblancos se impusieron en La Palmera a Elche (3-0), Osasuna (1-0), Villarreal (1-0), los búlgaros y el Girona (2-1), venciendo igualmente en Palma de Mallorca (1-2) y la capital finlandesa. En las cinco grandes Ligas, exceptuando al Madrid (18 de 18, con el 100% de los puntos anotados) y el PSG (22 de 24, un 91,7%), todos líderes, nadie puede presumir del 87,5% de los pupilos del 'Ingeniero', cuyo gran logro al frente de su equipo no es ése.
Ni siquiera el inconformismo, patente en la última temporada y media completa, con más de una docena de remontadas para ganar partidos en los que comenzó perdiendo. Este Betis, castigado por bajas tan importantes como los lesionados Fekir y Juanmi, más el problema de las inscripciones (que no quedó resuelto completamente hasta la jornada 4), apenas sabe lo que es ir por detrás en el marcador. Así, recogiendo el dato que lanzaba la semana pasada el compañero Fran Martínez (@LaLigaenDirecto), el conjunto de las trece barras ha ido a remolque sólo en 73 de los últimos 1.890 minutos oficiales. Ni siquiera un 4% (3,86%, para ser exactos) del tiempo. Una pasada que quedó reflejada ante el Girona, contestando Borja Iglesias desde el punto de penalti al tanto de Arnau Martínez apenas ocho minutos después de ese 0-1.