Los rivales de Guido para llevar el timón de los 'Toffees' y por qué su relevo favorito espantó al Betis

El Everton ha contactado con la agencia que representa al italo-argentino y tiene previsto hablar con los responsables heliopolitanos para formular una primera oferta

Los rivales de Guido para llevar el timón de los 'Toffees' y por qué su relevo favorito espantó al Betis
Wijnaldum, en plena rutina de entrenamientos. - @GWijnaldum
Óscar MurilloÓscar Murillo 5 min lectura

El Everton ha llamado ya a la puerta de Guido Rodríguez, de momento solamente para conocer su predisposición y sus exigencias económicas, mientras que el Real Betis no tiene noticias oficialmente, por lo que espera que, si realmente los 'Toffees' desean firmar al pivote, se pongan en contacto para discutir las cantidades. Así está previsto, según las informaciones que llegan desde Liverpool, aunque la entidad azulina está evaluando todas las opciones para potenciar un centro del campo que ha sufrido las bajas de Sigurdsson, Fabian Delph y Van de Beek (de vuelta al Manchester United). No cuenta demasiado para Frank Lampard el retornado Gbamin, que estuvo cedido en el CSKA de Moscú, por lo que toca mirar el mercado.

'Mirror' desvela que el elegido era Wijnaldum, a punto de dejar libre (como llegó) el PSG ante la reducción a la mitad de los minutos en París respecto a su etapa en el Liverpool, pero el neerlandés prefiere marcharse a Italia, donde José Mourinho le reclama para la Roma. Al míster del Everton le gustan dos jóvenes proyectos del Chelsea, Connor Gallagher (que sí parece convencer a Tuchel) y Billy Gilmour (cedido al Norwich en la 21/22), aunque necesita alguien de más experiencia y empaque. Ahí es donde aparece el nombre de Guido, por el que todavía no se ha realizado una oferta, pero cuyos perfil e informes han convencido al ex mediocentro 'blue'.

El que más gusta a los técnicos verdiblancos sigue libre

Desde el principio, cuando el Atlético de Madrid sondeó al Betis por el fichaje de Guido Rodríguez y conoció de primera mano que 30 millones de euros no serían suficientes, Antonio Cordón se puso manos a la obra para tener las espaldas bien cubiertas en el caso de que alguien llegara con 40 kilos, la mínima cantidad por la que se sentarían a hablar en Heliópolis por el italo-argentino. En primer lugar, los responsables verdiblancos se afanarían en la ampliación de Paul Akouokou, con contrato hasta 2024 y ofertas de varios clubes de Primera división, así como de las otras cuatro grandes Ligas europeas, pero en quien Manuel Pellegrini confía como relevo del ex de América, que conserva un 30% del pase (aunque los hispalenses pueden comprar el 20% a precio módico aún). Además, se ha peinado el mercado de pivotes para encontrar un recambio que no haga perder potencial al equipo en esa demarcación, pese a las renovaciones de Guardado y Camarasa, dos hombres de otro perfil.

Y, como avanzó ESTADIO Deportivo, uno de los que más gustaba a los técnicos béticos es Florian Grillitsch (26). El austríaco ha quedado libre tras su compromiso con el Hoffenheim y, tras brillar en la pasada Eurocopa, es una de las 'gangas' a priori en el escaso catálogo de mediocentros defensivos. Por eso extraña que, a estas alturas, todavía no tenga destino para la 22/23. De 1,87 y experiencia también como central, el canterano del St. Pölten, que terminó su formación en el Werder Bremen, ha estado en la órbita de clubes como Fiorentina y Galatasaray, mientras que ahora negocia con el Brighton. Llegaron a darlo por hecho en Florencia y Estambul, aunque allí acabaron espantados por lo mismo que retiró pronto al Betis de la subasta.

El sueldo que pretende, dos millones de euros netos, no es una barbaridad, como tampoco la prima de fichaje, aunque quienes han negociado con su entorno denuncian que sus allegados le están asesorando bastante mal, haciendo levantarse de la mesa a dirigentes 'violas' y del 'Galata' al imponer a última hora que la prima por llegar libre tenía que ser no de 1,5 kilos, sino de 2,5, para que la comisión familiar fuese mayor. No tiene nada que ver con Luis Alonso, el intermediario que le lleva actualmente y que, curiosamente, es el mismo de Arambarri, otra de las alternativas que manejan en el Benito Villamarín si sale Guido.