En un comunicado remitido por FASFE (la Federación de Accionistas y Socios del Fútbol Español), la emergente plataforma comunica que, con fecha 21 de marzo de 2023, la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte ha eliminado la obligación a la que estaban sujetas hasta ahora las personas con abono en las gradas de animación de los estadios de Primera y Segunda división de acceder a los estadios a través de un control mediante dato biométrico, mayoritariamente mediante la huella dactilar. Se acaba, así, con una medida sin duda destinada a controlar de manera más precisa quiénes ocupaban estas zonas de los campos de fútbol, a menudo asociadas a actos reprobables como el lanzamiento de objetos, aunque cometiendo el agravio de que pagasen justos por pecadores, amén de provocar inconvenientes como retrasos en la entrada a los recintos y altercados, como por ejemplo cuando se estropeaban los tornos y ciertos usuarios debían incorporarse ya con el partido empezado.
En el Benito Villamarín y el Ramón Sánchez-Pizjuán, por ejemplo, los diferentes colectivos ubicados en Gol Sur y Gol Norte, respectivamente, llevan meses demandando soluciones más prácticas y menos vejatorias, además de poder hacer uso de opciones a disposición de otros socios, como la cesión del abono. Ahora, al menos, el Real Betis ha accedido a que cada miembro de la grada de animación pueda designar dos suplentes en caso de no hacer uso de su asiento, ya que el beneficiado será el club por los datos de aforo. Esta comunicación de Antiviolencia se produce como respuesta al escrito que envió FASFE el pasado 1 de marzo en el que se requería “el cese inmediato de la medida de control de acceso mediante sistemas biométricos y la cancelación y borrado de todos aquellos datos tomados con motivo de la implementación de tales medidas”. Una solicitud remitida a la Comisión Estatal, así como a LaLiga, el CSD y los diecisiete clubes (entre ellos el verdiblanco y el Sevilla FC) en que les consta que existe este tipo de controles de acceso, después de que el gabinete jurídico de la Agencia de Protección de Datos, en respuesta a una consulta del colectivo 'La Hinchada del Arlanzón (Burgos CF)', estimara que el uso de esta medida restrictiva del derecho a la privacidad conculca la legislación.
"En FASFE consideramos que esta decisión, que elimina esa medida ilegal por invasiva de la privacidad y que suponía, además, una patente discriminación con el resto de espectadores que no estaban sujetos a ella, es un desarrollo positivo y un éxito de la movilización conjunta de las aficiones en defensa de sus derechos. Sin embargo, pese al avance que supone esta medida en materia de derechos de las aficiones, creemos que es insuficiente, al no eliminar totalmente este tipo de controles ni cancelar los datos biométricos ilegalmente tomados de las aficionadas y aficionados hasta ahora sujetos a esta obligación. Por estos motivos, FASFE seguirá trabajando a nivel legal y administrativo hasta el fin del uso de estos controles y la cancelación de todos los datos biométricos de aficionados que obren en poder de los clubes. En este sentido, FASFE se reserva el derecho de ejercitar cuantas acciones nos asistan en la defensa de los intereses de nuestros asociados y de los aficionados del Fútbol Español en general, incluidas las judiciales, así como aquellas ante la Agencia Española de Protección Datos", concluye la nota informativa del sindicato.