Óscar Murillo5 min lectura"Me siento ya al cien por cien. Llevo una semana y media entrenándome solo, pero bastante duro para que no me cueste estar con el grupo. Al principio, casi no podía hacer 'core', porque todos los ejercicios precisan de un abdomen bastante fuerte. He sentido alguna molestia, pero nada fuera de lo normal. La operación (se sometió el pasado 29 de agosto a una apendicectomía) fue una piedra más en el camino. Son cosas que no se pueden prevenir ni arreglar, sino que te vienen y ya está. Ahora, me tengo que ganar el sitio de nuevo, como siempre. Trabajaré duro para ello". Así comenzaba Aitor Ruibal su entrevista de este martes en los medios oficiales del club, donde confesó sentirse "muy querido" y con "muchas ganas de volver a jugar; ojalá toque hacerlo este jueves". Porque, por encima de todo, el de Sallent tenía claro que, pese a recibir ofertas este verano, no iba a salir: "Estoy donde quiero estar".
Al polivalente futbolista verdiblanco, una de las caras nuevas de la lista de convocados para Glasgow, le tocará de nuevo ejercer como lateral derecho por la lesión de Sabaly con Senegal, alternándose con su amigo Héctor Bellerín en una demarcación que no extraña, pues ya acumula muchos minutos en defensa, donde lo reubicó Javier Aguirre cuando dirigía al Leganés. "Me siento más cómodo actuando ofensivamente, porque siempre he jugado arriba y en la cabeza automatizas los movimientos, pero voy a jugar donde me toque y me adaptaré sin problemas, como he dicho siempre", asevera el '24', que tira de autocrítica tras la goleada en Barcelona: "Es verdad que, cuando nos meten un gol, nos venimos bastante abajo y el equipo lo nota. Como con el Athletic, después del primero nos meten 4-5. Tenemos que ser más duros, con buena mentalidad y seguir adelante, porque traspiés tiene cualquiera".
No obstante, el atacante reconvertido cree que se han "caracterizado estos años atrás por ser un equipo fuerte en defensa y recibir pocos goles", aunque cada temporada hay fechas en las que han "recibido muchos en pocos partidos. Pero esto es fútbol y es inevitable. Te enfrentas con un equipazo espectacular como el Barça, que se pone en 'modo apisonadora'; lo dejas vivo en los primeros 30 minutos, cuando tienes 3-4 ocasiones, perdonas y ellos no te perdonan". Ahora, eso sí, deben pasar página todos y centrarse en el debut continental: "Evidentemente, tenemos que dar un paso adelante en Europa. Creo que el equipo está convencido de ello, si bien el míster igualmente nos ha hecho ver que es muy importante no dejar de lado dos competiciones que también ilusionan mucho como LaLiga y la Copa del Rey. Lo que te mantiene arriba al final es LaLiga. La UEL nos gusta mucho y, aunque es muy difícil, vamos a intentarlo".
Aitor recuerda que la barrera de octavos de final es algo que también les ocupa y preocupa: "Hace un par de años lo tuvimos muy cerca y el Eintracht nos eliminó en el minuto 120, pero tenemos que superar ese listón". A priori, "el Rangers es el equipo más conocido del grupo, aunque ganar fuera de casa en la UEL es complicadísimo, por lo que tratarán de "sumar estos tres puntos y salir reforzados para el partido del domingo ante el Cádiz CF". El versátil futbolista catalán es consciente de que "el calendario es apretadísimo y difícil", pero también cree que eso les "puede venir bien para subir en LaLiga y mantenerse ahí arriba". Y entiende que hay plantilla para ello. Tras los últimos movimientos estivales, estima que "no es ni mejor ni peor que la que había, porque la competitividad va en lo que quiera dar cada uno". A juicio de Ruibal, tienen "una grandísima plantilla", aunque el traspaso de de Luiz Felipe le baja la nota: "Nos ha hecho daño, porque no puedes traer a nadie de su nivel. Estoy muy contento de estar en ella; creo que vamos a hacer un buen año".