El fichaje de Abde por el Real Betis, acordado este mismo viernes por la mañana con el FC Barcelona, corrió serio riesgo de romperse. El problema radicaba en que los dirigentes verdiblancos no han conseguido que el Al-Ittihad envíe la conformidad definitiva y las garantías de pago por Luiz Felipe, lo que, pese al traspaso de Paul al Lyon, impedía que hubiese margen salarial para encajar la operación del marroquí, así como dejaba también las manos atadas a Ramón Planes para firmar un sustituto en el eje de la defensa. Esto hizo que la propia entidad culé comunicase a su homóloga heliopolitana que debía escuchar otras propuestas, filtrándose que Atlético de Madrid (con el dinero de Carrasco, aunque el Cholo pidió a Hobjberg), Aston Villa (pese a la negativa del interesado a irse a la Premier, Monchi y Emery presionaron), CA Osasuna y Sevilla FC pujarían por el '16' azulgrana.
La solución encontrada en La Palmera fue la presentación de nuevos avales personales por parte de Haro y Catalán, que ya utilizaron su propio patrimonio el curso pasado para adelantar 6 de los 6,3 millones necesarios para agilizar la inscripción de los futbolistas que restaban por ser oficializados y que hace unos días hicieron lo propio con 4 más a cuenta de la ampliación de capital aprobada por valor de 43 kilos. Según la reglamentación, como quiera que se puede aportar por esta vía hasta el 5% del presupuesto, aún podían respaldar financieramente algo más de tres millones, cantidad suficiente, al parecer, para salvar lo de Abde. El Barça se hizo cargo y dio facilidades, al ser ya materialmente imposible un 'plan B', reduciendo el montante de la venta de 10 a 7,5 millones por la mitad de los derechos del de Beni Melal, con opción de recompra de 20 kilos, pero no está confirmado que compartan la ficha, como publicaron algunos compañeros. Desde la zona noble del Benito Villamarín insistían en que iba a ser "muy complicado" llegar a tiempo, aunque no lo descartaban. El propio Pellegrini se unió al cónclave a última hora de la noche, asistiendo al rescate de la operación y su visado por parte de LaLiga, ambos sobre la bocina literalmente. Abde firmará hasta 2028.
El extremo no se había ejercitado por la tarde el 1-S con permiso de Xavi para esperar la resolución de su futuro, que deseaba que siguiera pintando en verdiblanco, aunque ya no estaba en sus manos. Por otra parte, quedaba ya claro que, salvo comunicación 'in extremis' desde Jeddah, solamente sería posible, si lo era, la contratación de Abde. No habrá recambio para Luiz Felipe en caso de que su salida se cierre en los próximos días, algo viable al haber ventana de transferencias en Arabia Saudí hasta el 7 de septiembre, pese a que se había publicado el 20 de este mes como fecha límite. El Al-Ittihad habría llegado a un acuerdo con Salah por tres temporadas, en las que cobraría más de 200 millones de euros limpios, poniendo sobre la mesa del Liverpool cerca de 250 por la venta. De momento, los dirigentes 'reds' son tajantes en la negativa. De rendirse a partir de este sábado y retomar lo del brasileño, el Betis, con hasta tres dorsales vacantes entonces, podría acceder a alguien en paro.
La buena nueva con el internacional marroquí llegó a cinco minutos de la medianoche, como confirmaba el CEO Ramón Alarcón, tras el envío de toda la documentación pasadas las 23:00 y su refrendo en tiempo y forma con una validación provisional. El programa especial de DAZN 'Límite 24 horas', que narraba la autorización de los fichajes en directo y en exclusiva desde la planta 7ª de la sede madrileña de la patronal de los clubes profesionales españoles, confirmaría una entente que ya corría como la pólvora por todos los medios catalanes. La rebaja del Barça, que le sirve además para apuntalar las llegadas de Joao Félix y Joao Cancelo (por los que también tuvo que presentar avales Laporta), propició un acuerdo final con el Real Betis que se fundamentó en la aportación de entre tres y cuatro kilos por parte de Haro y Catalán, según 'Abc', que, como ocurriera en la 22/23, se les reembolsarán en cuanto haya ventas o se reduzca la masa salarial antes del 30 de junio de 2024, ya que cuatro días más tarde, de no ser así, pasarían a ser patrimonio neto con carácter no reintegrable, pudiendo ser aplicados para cubrir deudas vencidas de la entidad.