Félix Garreta (19) se está preparando a conciencia para ser el próximo año uno de los cuatro centrales a las órdenes de Manuel Pellegrini, que seguramente necesitará refuerzos en esa demarcación. Marc Bartra (32), que se recupera de una grave lesión de tobillo, termina contrato el verano que viene, lo mismo que un Sokratis Papastathopoulos (35) que difícilmente acumulará ya los 25 partidos con más de 45 minutos que precisa para renovar automáticamente. El Real Betis ha decidido ejercer la opción de compra por Chadi Riad (20), cifrada en alrededor de tres millones de euros, bonus incluidos, por el 50% del pase, pero resta cerrar un acuerdo con Germán Pezzella (32), con contrato hasta 2025 y que, por ende, entraría en su último año de vinculación. Buscará Ramón Planes rejuvenecer una zona que, además, ganaría opciones de revalorización futura con el tanteado Vitao (23).
Por eso, viene muy bien que Félix esté aprovechando su 'Erasmus' en la SD Amorebieta, que lucha por la permanencia en Segunda división. Pese al cambio de entrenador, el catalán sigue siendo fijo en el conjunto vasco, primero como lateral izquierdo por las bajas y últimamente en su posición natural en el eje de la retaguardia. No en vano, contando la eliminatoria copera que ganaron frente a la UD Levante, son ya nueve titularidades consecutivas para el dorsal 28, que solamente ha descansado diez minutos en estos casi dos meses de competición. En total, el zurdo suma 1.281 minutos como azulillo, en los que apenas ha visto dos tarjetas amarillas. Y lleva el mismo número de goles, pues anotó uno en el 2-2 de la segunda jornada en el Carlos Belmonte ante el Albacete Balompié y abrió el marcador este domingo frente al Real Zaragoza, rematando a la media vuelta y sin dejarla caer tras un rebote a la salida de un córner.
Antes del descanso, Maikel Mesa empataría de penalti para los aragoneses, que reclamaron con razón otras dos penas máximas, aunque bien es cierto que el marcador también pudo ser diferente a favor de los locales en Lezama, tras fallar Eneko Jauregui desde el punto fatídico a los tres minutos. Lo enmendó Félix en el 10, aunque, seis más tarde, desde el VAR no avisó Fuentes Molina al colegiado principal, López Toca, de que Morcillo clavaba los tacos en el gemelo de Mesa, lo que le habría supuesto la roja directa. También se libró de la expulsión y de otro penalti el zaguero a préstamo desde el Betis, pues, al filo de la hora de partido, sacó bajo palos un disparo de Toni Moya que se colaba. Lo hizo sacando disimuladamente el brazo izquierdo, que recogió a tiempo de que pareciera que despeja con el pecho, aunque la infracción es clara. Esta vez, la pillería le salió bien, pues el partido acabó 1-1 y el Amorebieta, con 15 puntos, empata con el colista FC Cartagena a cinco de la salvación.