Las dos derrotas consecutivas ante el Legia de Varsovia, en la Conference League, y en El Gran Derbi frente al eterno rival han dado pie a un parón repleto de dudas en torno al Betis. Desde las altas esferas del club se pide hacer autocrítica en todos los estamentos. Es tiempo de hacer análisis para buscar soluciones. Pero aunque son varias las causas de este discreto arranque de temporada, a nadie escapa que la falta de acierto de cara a gol tiene mucho que ver a la hora de explicar la actual situación, con 12 puntos de 27 posibles en LaLiga.
Con ocho goles a favor en nueve jornadas, ni siquiera Lo Celso ha podido esconder un problema desconocido bajo el mano de Manuel Pellegrini. El argentino ha hecho cinco tantos, completando la nómina Bartra, Abde y Vitor Roque, lo que arroja una pobre media de 0,89 dianas por partido, lejos de lo que acostumbra un equipo que ha logrado clasificarse cuatro veces consecutivas para Europa, algo jamás visto en La Palmera, a las órdenes del técnico chileno.
Sólo hay cinco conjuntos que hayan anotado menos tantos que los verdiblancos hasta la fecha en el campeonato liguero: Valladolid (5), Valencia (5), Leganés (5), Getafe (6) y Real Sociedad (7). Pero lo realmente preocupante es que, comparándose consigo mismo, el actual Betis registra el peor arranque anotador desde que el 'Ingeniero' se sienta en el banquillo del Benito Villamarín.
El pasado curso a estas alturas se habían celebrado tres goles más (11), siendo hasta entonces el registro más negativo, pues en la 22/23 se firmaron 13 dianas en los 9 primeros partidos, quedándose entre medias (12) tanto en la 20/21 como en la 21/22. Siempre con una media superior al gol por encuentro, algo que el equipo heliopolitano mantuvo hasta el final en cada una de las cuatro campañas de la 'era Pellegrini'.
La mejor temporada en este sentido fue la 21/22, cuando se alcanzaron los 62 goles en LaLiga (1,63 por partido). Antes, en el estreno del chileno en la 20/21, el contador se paró en 50 tantos (1,31 de media), mientras que ya en las dos últimas campañas comenzó a bajar esa capacidad anotadora: 46 en la 22/23 (1,21) y 48 en en la 23/24 (1,26).
El preparador verdiblanco, por tanto, debe encontrar soluciones para poner remedio cuanto antes a una rémora que de persistir dificultaría mucho sus aspiraciones europeas. Ni siquiera el gran momento de Lo Celso, que ha anotado casi el 63% de los goles del equipo, esconde un problema desconocido.