La propia configuración de la lista A para la Conference League, con el descarte (aparte de los ya ausentes Sergi Altimira y Youssouf Sabaly) de Sokratis Papastathopoulos, Pablo Fornals y 'Chimy' Ávila para incluir a Chadi Riad, Johnny Cardoso y Cédric Bakambu en lugar de los cuatro que se marcharon (Luiz Felipe, Andrés Guardado, Luiz Henrique y Borja Iglesias, porque Juan Cruz tampoco estaba entre los elegidos en verano para la Europa League), da pistas sobre la incertidumbre que se vive tanto en el vestuario como en la planta noble del Benito Villamarín acerca del futuro de dos de sus futbolistas, que siguen en el punto de mira de clubes cuyas Ligas están con el mercado abierto. En concreto, la turca (hasta el viernes 9 de febrero) y la brasileña (hasta el jueves 7 de marzo), con William Carvalho y Willian José como claros objetivos de Besiktas y Palmeiras, respectivamente.
Manuel Pellegrini, técnico del Real Betis, no las tiene todas consigo desde lo que ocurrió a primeros de octubre con Luiz Felipe, vendido al Al-Ittihad saudí por 22 millones de euros fijos y tres en variables. "Es imposible saber qué ocurrirá en lo que queda de mercado de otros países, pero no espero ningún movimiento más en la plantilla", terciaba el chileno en sala de prensa, aunque, por si acaso, ha incluido al congoleño en la nómina de la UEFA y no al argentino o a Fornals, con sus posiciones más cubiertas, ya que corre el riesgo de quedarse sin un delantero centro de referencia para la UECL. En el eje de la medular, lo mismo: eligió entre Johnny y Altimira, descartando a Pablo, pues a Guido le queda hasta marzo y, si se va el internacional portugués, habría una laguna ahí sin Guardado. Atrás, sólo quedaba una plaza para Chadi o Sokratis.
Las últimas noticias que llegan desde Estambul es que los blanquinegros habrían renunciado a Carvalho, que ha exigido un contrato hasta 2027 y 3,5 millones de euros netos por cada año completo para abandonar Heliópolis, una cantidad que no está dispuesto a pagar el Besiktas por un futbolista de 31 años, por mucho que haya sido una petición de Fernando Santos. Además, el dueño de sus derechos federativos lo que queda de curso y los dos siguientes no se conforma con ahorrarse su salario, el segundo más alto (2,5 limpios) tras el de Fekir, sino que pide alguna compensación para afrontar la amortización pendiente de su fichaje y las variables, que alcanzarían aproximadamente los seis millones, aunque con algo menos de la mitad se darían por satisfechos. La operación se sale de presupuesto en la capital turca, aunque la amenaza sigue vigente mientras haya oportunidades.
En el caso de Willian José, presuntamente con un acuerdo económico para volver a Brasil y vestir la camiseta del Palmeiras, tampoco hay entente entre clubes. El Betis ya le ha dicho al 'Verdao' que no cederá con opción de compra al de Porto Calvo, como sí han conseguido de la UD Almería por Lázaro Vinícius, así que deberán rascarse el bolsillo los emisarios paulistas de 'tour' por España. Según ha podido conocer ESTADIO Deportivo, las dos primeras propuestas tampoco han convencido, pues se pusieron sobre la mesa 6 millones de euros por el 80% del pase del artillero y, después, algo menos (5) por la mitad, aunque los responsables hispalenses no aceptarán menos de 8, teniendo en cuenta las amortizaciones pendientes y las escasas opciones de que, con 32 años, vaya a haber una transferencia futura de la que seguir recibiendo réditos reseñables.