Durante el pasado mercado de verano, el Real Betis estuvo vivamente interesado en incorporar a su filas a Youssoufa Moukoko. Durante semanas, se trabajó en ese frente y se llegó a un acuerdo con el jugador. Pero al igual que sucedió con el central Soumaïla Coulibaly, con el que también se negocio ante las dificultades para atar a Vitao (al final llegó Natan), el Borussia Dortmund se mostró inflexible al exigir una obligación de compra de 15 millones de euros más bonus por el ariete de origen camerunés.
Finalmente, en Heliópolis cambiaron de objetivo y se lanzaron a por Vitor Roque, consiguiendo una cesión con una opción de compra superior (25 kilos), pero no obligatoria. Una decisión que, visto lo visto, ha sido acertada. Y no sólo porque el brasileño sume 5 goles con la camiseta verdiblanca y el germano sólo dos en 13 partidos con el Niza, donde acabó recalando cedido tras romperse también las negociaciones con el OIympique de Marsella.
Las últimas informaciones en torno a la figura del internacional alemán ponen en entredicho tanto su identidad como su edad real y, con ello, buena parte de su carrera. Un escándalo que habrá hecho que los responsables del club de La Palmera respiren aliviados, pues de haberse concretado su fichaje se habrían visto salpicados de algún modo por esta insólita situación.
Todo viene originado por unas declaraciones de Joseph Moukoko, al que hasta ahora se consideraba su padre. "En conocimiento de la punibilidad de una declaración jurada falsa, declaro bajo juramento que Youssoufa Moukoko no es hijo biológico mío ni de mi esposa Marie Moukoko. Tampoco nació el 20 de noviembre de 2004 en Yaundé, Camerún", recoge el documento publicado por el diario Bild.
Además, el supuesto progenitor del delantero ha admitido el fraude que realizaron para hacerlo pasar por alguien cuatro años más joven, con lo que habría jugador de forma antirreglamentaria tanto en las categorías inferiores del Borussia Dortmund como de la selección de Alemania, con la que se proclamó campeón de Europa sub 21. Una maniobra que pone de este modo en entredicho su meteórica carrera, pues no tendría 20 años, sino 24.
"En realidad nació el 19 de julio de 2000. Lo hicimos cuatro años más joven. Ahora figura como nacido el 20 de noviembre de 2004", señaló Joseph en el documental emitido en la cadena ProSieben, al tiempo que en la investigación de Bild se indica que encontraron un niño llamado Youssoufa Mohamadou que nació en el año 2000 y que estaba registrado como hijo de Ousman Mohamadou, un taxista de la ciudad. El Borussia Dortmund, por su parte, ha salido al paso para negarlo todo, pero la duda está sembrada y a buen seguro habrá más episodios de un culebrón del que se han librado en el Real Betis.