El prometedor centrocampista Marc Casadó ha reivindicado el talento joven que está sosteniendo al FC Barcelona ante los problemas económicos que impiden realizar e inscribir fichajes y la incesante plaga de lesiones de extrema gravedad que la plantilla viene padeciendo en los últimos meses. Lamine Yamal (17) es el claro líder de esta generación de insultante juventud y maravillosa calidad, con Pau Cubarsí (17) como principal escudero y con pujantes nombres que se abren camino como los del lesionado Marc Bernal (17) o la camada que tuvo minutos en la debacle de El Sadar: Pau Víctor (22), Gerard Martín (22), Sergi Domínguez (19), Pablo Torre (21), Héctor Fort (18) o el propio Casadó (21). A estas alturas, otros como Pedri (21), Ansu Fati (21), Alejandro Balde (20) o los convaleciente Gavi (20) y Fermín (21) parecen ya veteranos pese a ser incluso menores que algunos de los canteranos que acaban de salir del prolífico horno de La Masía.
Jóvenes Aunque Sobradamente Preparados (JASP). Lejos de amilanarse tras encajar el segundo revés de la temporada y por escuchar las primeras críticas a Flick por su 'imberbe' once ante Osasuna, Casadó asegura que en el seno del vestuario azulgrana hay muchas ganas de "ilusionar a la afición" dedicándole este martes ante el Young Boys suizo la primera victoria en la Fase de Grupos de la UEFA Champions League y olvidando así el tropiezo en Pamplona y el mal inicio continental en Mónaco (2-1). "Hay muchas ganas de darle la vuelta y mucha motivación por sumar estos tres puntos", destacó el mediocentro, quien apunta a la titularidad ante la ausencia de Eric García por sanción y a pesar del regreso, por fin, de Frenkie de Jong.
"No va a ser fácil ganar. Sabemos que el Young Boys será un equipo duro. No hay equipos fáciles en esta competición. Será un bloque compacto, sabemos que tienen jugadores potentes y rápidos arriba, y habrá que vigilar esas contras", analizó con madurez, mostrando respeto por el rival pero recordando que el foco debe estar en lo mucho que este Barça es capaz de hacer si hay concentración y salen las cosas. "Hay una muy buena plantilla. Es verdad que es joven y que hay muchos que estamos empezando como profesionales, pero creo que es muy, muy buena, y este escudo exige que todos tengamos la ambición de ganar títulos", apuntó, ambicioso, defendiendo a su generación.
El centrocampista catalán, que ha pasado de entrar y salir de las alineaciones del filial en Primera RFEF a hacerlo como titular en el primer equipo a las órdenes de Hansi Flick, dijo sentirse "muy cómodo" con este nuevo rol. "El míster -sentado a su lado- me ha ayudado mucho, me da mucha confianza para jugar y también me dice muy claro lo que tengo que hacer para que pueda sacar lo mejor de mí", explicó Casadó, quien restó importancia a su buen rendimiento dando todo el mérito a la calidad de sus compañeros: "Es muy fácil jugar al lado de jugadores de nivel mundial como Pedri o Raphinha".
Otro compañero para el que tuvo piropos fue para Frenkie de Jong, que por fin ha dejado atrás su larga lesión de tobillo que le dejó sin Eurocopa. El regreso del medio neerlandés, a priori, podría devolver al banquillo a Casadó, quien lejos de mostrarse preocupado por esta posibilidad no dudó en celebrar la recuperación de un futbolista llamado a ser unos de los líderes de esta joven plantilla: "La vuelta de Frenkie es beneficiosa para el equipo, cuantos más jugadores disponibles, mejor para todos. No he hablado con Flick sobre ello, pero seguro que Frenkie vuelve próximamente y nos ayuda mucho".