Ansu Fati regresa a Barcelona con la intención de ganarse una segunda oportunidad en el conjunto culé. El atacante sevillano volvió a cuajar una temporada marcada por las lesiones, pero asegura sentirse bien, preparado y listo para convencer a los técnicos. Su continuidad en la entidad catalana no está confirmada y el mercado de fichajes no se olvida de su figura. Muchos actores implicados en una película que vivirá este verano una nueva trama. Todo está por decidir, aunque un hombre tiene la llave a este culebrón.
A sus 21 años, Ansu Fati iba para estrella. Sin embargo, las lesiones le han impedido demostrar con regularidad su valía. En los cuatro años que defendió la camiseta azulgrana disputó un total de 112 partidos oficiales en los que anotó 29 goles y repartió diez asistencias. Los continuos y persistentes problemas físicos optaron por cerrarle la puerta y Xavi Hernández y el club optaron por mandarlo cedido al Brighton de la Premier League.
Allí comenzó fuerte y contó con minutos por parte de De Zerbi, pero otra lesión en diciembre terminó por truncar su progreso y reválida. Participó en 27 partidos y su aparición en la segunda vuelta fue esporádica. Ahora regresa a la Ciudad Condal con el que tiene contrato hasta 2027 y su intención es quedarse.
El jugador originario de Guinea-Bissau se reunió con Deco la semana pasada para conocer de primera mano las impresiones del club. Y la consigna fue clara. El nuevo entrenador está dispuesto a darle una oportunidad si se la gana en pretemporada. Este jueves, Ansu Fati se ha sometido a un test de fuerza y los resultados han sido positivos, según publica el diario Sport.
Más allá de su estado físico, hay otro factor a tener en cuenta. Y es el tema económico. Fati pasará a ganar 10 millones de euros esta temporada. Una cifra muy elevada que no se corresponde con su rendimiento actual. Las arcas del Barça continúan muy debilitadas.
Luego está la competencia. En su puesto habitan nombres como el de Raphinha, Ferran Torres o Joao Félix, con el que se negociará otro año de cesión con el Atlético de Madrid. Su futuro no está claro y equipos aparecen en la sombra con la intención de ficharlo.
Uno de ellos es el Sevilla FC. Salió de su cantera rumbo a Barcelona hace ya algunos años y su padre siempre lo saca a relucir en cada comparecencia pública. El único que puede despejar esta incógnita es el técnico alemán. Flick valorará qué hacer con el jugador. Ofertas no le van a faltar e incluso desde Turquía lo vinculan con el Fenerbahce de José Mourinho.