El FC Barcelona ha terminado oficialmente la temporada y se enfrenta ahora a uno de los veranos más importantes de los últimos años. El club catalán necesita replantearse su estrategia y planificar meticulosamente la próxima temporada para poder recuperar su posición dominante tanto en el ámbito nacional como en el internacional. Con una situación económica delicada, Joan Laporta y su equipo de gestión tienen la importante tarea de realizar varias operaciones de calado en el mercado para ajustarse al 'fair play' financiero y poder reforzar bien la plantilla.
La salud financiera del Barcelona sigue siendo precaria y para revertir esta situación debe realizar ventas significativas. El club necesita generar ingresos millonarios que permitan reinvertir ese dinero en otros futbolistas y construir así un equipo competitivo. Este verano se considera decisivo para el futuro del Barça: podría ser el punto de inflexión hacia una recuperación deportiva o, por el contrario, marcar el inicio de una decadencia de la que sea difícil recuperarse.
El cambio de entrenador podría facilitar las cosas, permitiendo renovar la plantilla. La directiva del Barcelona es consciente de la necesidad de desprenderse de jugadores clave y traer nuevos fichajes. Con la temporada finalizada, las reuniones con potenciales socios comerciales y clubes interesados en los jugadores del Barça se intensificarán.
Uno de los activos más valiosos que el Barcelona tiene en el mercado es Raphinha. Tras realizar una temporada notable, con 10 goles y 13 asistencias en su haber, el extremo brasileño se ha revalorizado considerablemente, llamando la atención de varios clubes importantes de Europa.
Raphinha es un futbolista rápido, habilidoso en el uno contra uno y con un potente disparo exterior, características que lo convierten en un futbolista muy atractivo en el mercado.
Según apuntan algunos medios, el Barcelona habría rechazado una oferta considerable de la Premier League: 60 millones de euros más 20 en variables. Esta oferta fue descartada ya que el club busca una cifra superior a los 80 millones. Una postura similar adoptó el Barça en enero pasado, cuando dos clubes de Arabia Saudí mostraron interés en el brasileño, pero no alcanzaron las expectativas económicas del club catalán.
La operación para vender a Raphinha sigue parada, a la espera de nuevas ofertas que se ajusten a las demandas del Barcelona. La Premier League aparece en el horizonte como el destino más probable, dada la capacidad financiera de sus clubes para cumplir con las expectativas económicas del Barça. Raphinha, quien ya tiene experiencia en el fútbol inglés, vería con buenos ojos un regreso una liga en la que ya jugó antes de fichar por el Barcelona. Las próximas semanas serán decisivas para el futuro de Raphinha y, por consiguiente, para la estabilidad financiera del Barcelona.