Susto para el Atlético de Madrid por Griezmann

El Atlético de Madrid y el Almería se miden en el Cívitas Metropolitano en un duelo marcado por las necesidades diferentes de uno y otro conjunto. En el caso del conjunto indálico, todavía no ha logrado una victoria en lo que va de temporada y llega, además, después de caer eliminado contra el Barbastro (de Segunda RFEF) en Copa del Rey. De lado del conjunto de Diego Pablo Simeone, llega después de sufrir una derrota que hirió su orgullo en Montjuïc, ante el FC Barcelona y merced al gol de un Joao Félix que celebró con rabia.

Ante su público, el Atlético de Madrid se hace fuerte. Es el Cívitas Metropolitano un equipo se hace de su casa todo un fortín, de hecho, nadie en Europa acumula la racha de victorias en casa que el conjunto de Simeone, que apunta a superar su récord de 21 partidos ganando. De momento, suma 18 (que podrían ser 19 si termina ganando al Almería).

Salió fuerte el conjunto colchonero, que pronto logró un gol, de Antoine Griezmann. Sin embargo, el tanto terminó siendo anulado por un ajustado fuera de juego, previo aviso del VAR. Pero el francés es fundamental también en el ámbito de la creación. De hecho, él inició las dos jugadas que terminaron en gol: la primera de Morata (que logra marcar después de 4 jornadas en el dique seco) y la segunda de Ángel Correa (que se resarce después de errar ante el Barcelona).

En los últimos compases de la primera mitad llegó, no obstante, el susto para el Atlético de Madrid. No sólo por el avance del conjunto indálico, que trató por todos los medios de recortar distancias, sino también por el futbolista francés (que está a tres goles de igualar a Luis Aragonés, goleador histórico y leyenda del conjunto colchonero).

Después de varios minutos en los que apretaba el Almería de Garitano, el conjunto colchonero salió con un balón en profundidad en el descuento (era lo que Simeone le estaba pidiendo a Oblak desde el área técnica). Y antes de que el colegiado pitara el final del los 45+4, Antoine Griezmann sufrió un golpe en un lance del partido, choque fortuito con Robertone.

Sobre la bocina, el futbolista francés que hoy jugaba más retrasado (para que la dupla ofensiva estuviera conformada por Correa y Morata) se tiró sobre el terreno de juego. Y cuando el colegiado señaló el final, siguió así. Rápidamente las asistencias médicas y los compañeros corrieron para ver cómo se encontraba el jugador, que se dolía de la zona de la cadera tras esa última acción. Salió por su propio pie, aunque cogeando. Al inicio de la segunda mitad, Antoine Griezmann continuó sobre el terreno de juego y tampoco formó parte de los cambios ya iniciado el segundo periodo. No obstante, está por ver en que queda ese golpe, a uno de los jugadores en mejor forma del conjunto colchonero, indiscutible para Simeone.