Las alarmas saltaron este pasado domingo en el Sánchez Pizjuán. Álvaro Morata chocaba con Soumaré al filo del descanso, tras una primera mitad en la que se mostró muy activo, y se echaba las manos a la rodilla derecha, haciendo contener la respiración a todos en el seno del Atlético de Madrid.
Las lágrimas del delantero al ser sustituido por Memphis hacían temer lo peor. Además de Simeone y sus compañeros, también asistía preocupado a su percance el seleccionador nacional, Luis de la Fuente, que presenciaba desde el palco al partido de los colchoneros ante el Sevilla. Incluso, hay quien llegó a temer por su presencia en la Eurocopa de Alemania
Pero, por fortuna, su lesión ha sido menos grave de lo que se aventuraba en un principio. Según ha anunciado el club madrileño en un comunicado, el internacional sufre una contusión ósea y un esguince del ligamento lateral interno de la rodilla derecha.
No se ha ofrecido un plazo estimado de baja, pero se calcula que estará en el dique seco entre dos y cuatro semanas, lo que le impedirá jugar la ida de los octavos de final de la Champions ante el Inter de Milán, siendo duda para la vuelta.
Además, el atacante también se perderá el crucial duelo ante el Athletic en San Mamés, en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey, y los dos próximos partidos de LaLiga EA Sports, ante Las Palmas y Almería.
Mientras tanto, el propio Morata ha expresado este lunes que, "gracias a Dios", no tiene "nada grave" en la rodilla derecha, avanzando que "pronto" estará a "tope" para volver a la competición con el conjunto rojiblanco, con el que suma 19 goles y dos asistencias en 33 partidos oficiales en la presente temporada.
Han sido muchos los gestos de apoyo y los ánimos recibidos por el jugador del Atlético de Madrid, tampoco han faltado en las redes sociales otros comentarios nada agradables de sus detractores. Ante ello, Morata ha preferido tomárselo con filosofía y mandarle un recado a su 'haters'.
"Gracias a Dios, no tengo nada grave. Muchas gracias por los mensajes positivos, ojalá que toda la gente que muestra su odio tuviera tantas ganas de ser feliz y de trabajar como de desear el mal. Pronto a tope", publicó en su cuenta de Instagram, tras ser sometido a una resonancia magnética que descartó una lesión grave en la articulación.