La Liara-Rociera disputado el pasado sábado no acabó en el terreno de juego (1-1). El encuentro finalizó con polémica, ya que el anfitrión empató en el epílogo, tanto que no concedió el árbitro en primera instancia y sí una vez redactó el acta.
No obstante, el conjunto nazareno no se quedó de brazos cruzados y presentó un escrito al
Comité de Competición, que ha terminado dándole la razón, por lo que finalmente ha obtenido los tres puntos.
La Rociera argumenta que se pone de manifiesto en el punto 2º de la Regla 5 de las Reglas de Juego para la presente temporada de la
IFAB, que establece entre otras cuestiones, que "una vez finalizado el partido el árbitro no podrá cambiar una decisión si se da cuenta que era incorrecta o conforme a una indicación de otro miembro del equipo arbitral".
Al respecto, el comité dictamina que: "Tras la detenida y repetida revisión de la prueba videográfica aportada por el
PD Rociera, el
Comité acoge las alegaciones del club, al quedar acreditado por las imágenes y principalmente por lo recogido por el propio árbitro en el anexo al acta, que reconoce dar validez al gol una vez finalizado el encuentro, cuando ya no es modificable el resultado, existiendo por tanto un grave error material manifiesto por parte del colegiado del partido".
Además de perder el partido, el Municipal Marismas ha sido clausurado un encuentro y restado un punto a
La Liara por calificar de graves los incidentes sufridos por el árbitro y recogidos por el acta y el anexo.