André Geraldes, ex director deportivo del
Sporting de Portugal, estuvo el pasado verano sobre la mesa del consejo de administración sevillista
como posible sustituto de Óscar Arias al frente de la planificación deportiva nervionense, algo que finalmente evitó la acusación de corrupción deportiva que se le atribuyó (Cashball).
Desde este mismo domingo, en cambio, es libre para decidir su futuro profesional, después de que se hayan extinguido las
medidas de coacción a las que estaba sujeto en
Cashball.
Según el diario portugués
CM,
Geraldes maneja una cartera de clubes en
Arabia Saudita,
Italia,
España y
Portugal, aunque,
tal y como ha podido confirmar ED, su deseo es aterrizar en
LaLiga. En Nervión,
Joaquín Caparrós le cierra la vía.