La Dirección General de Tráfico (DGT) instala radares con el único objetivo de la seguridad y sin ningún afán recaudatorio. Estos dispositivos, que normalmente sirven para controlar el cumplimiento de los límites de velocidad, son instalados de forma estratégica en lugares donde hay índices elevados de accidentes relacionados con el exceso de velocidad.
Aunque la ciudad de Madrid es la que más multas emitidas por radares posee, Sevilla ocupa el tercer lugar, según datos de 2023. Ahora la capital hispalense podría superar los registros, y quién sabe si alcanzar a Barcelona, segunda ciudad con mayor número de multas por radares, debido a que han instalado un dispositivo nuevo.
Se trata de un radar de velocidad fijo, el cual está situado en la A-49, exactamente en el sentido creciente de dicha autovía, dirección Huelva, también llamada Autovía del V Centenario. Para ser más exacto, este nuevo radar se ubica muy cercano a la incorporación desde Camas y tiene un límite de velocidad de 90 kilómetros por hora, situándose en un tramo de carretera que tiene un cartel de aviso de que es un "tramo de concentración de accidentes".Dicho radar todavía no ha sido registrado en la web de la Dirección General de Tráfico (DGT), donde deben encontrarse todos los radares de las carreteras españolas, pero varios usuarios de redes sociales han informado de su presencia, además de que en la vía ya está instalado un panel informativo avisando del límite de velocidad de 90 km/h en dicha ubicación.
Este radar complementa el que hay en la misma ubicación pero en el sentido decreciente, en la bajada dirección a Sevilla. En este caso, el límite de velocidad es de 80 kilómetros por hora y se trata de uno de los radares que más multas pone en toda la ciudad de Sevilla.
Hay que recordar que, según un estudio de la OCU realizado hace algunos meses, la autovía A-49 es la que peor estado de conservación tiene de toda Andalucía y la tercera peor de España.
Durante el trayecto en la propia autovía se informa a los conductores de que hay 57 kilómetros en mal estado, una autovía por la cual circulan diariamente cerca de 100.000 vehículos.
La peor parte de la autovía está entre los kilómetros 21 y 78, donde los baches, socavones y grietas son una constante, algo que aumenta el peligro de los conductores.