El Banco de España, supervisor del sistema bancario español, ha decidido retirar de la circulación los billetes de 50 euros. Eso sí, no todos los billetes de esta cantidad van a dejar de circular, se trata sólo de cambiar los que se encuentren en mal estado por unos nuevos.
Los billetes también se deterioran con el paso del tiempo, lo que ha llevado al Banco de España a tomar esta decisión. Aunque la noticia puede generar dudas o cierta incertidumbre, nadie que tengan un billete de 50 euros deteriorado va a perder ese dinero.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que el Banco de España ha puesto como plazo el próximo mes de julio para sacar esos billetes de la circulación. A su vez, también ha creado una serie de protocolos para realizar el cambio de dichos billetes por otros nuevos, algo que hace en su constante trabajo por mejorar el sistema monetario español.
Aunque parece que el dinero en efectivo está desapareciendo, sobre todo desde la pandemia de la COVID-19, lo cierto es que todavía son muchas las personas que trabajan con dinero en efectivo, de ahí esta decisión del Banco de España.
Según explica el organismo público, para realizar el cambio de un billete deteriorado por uno nuevo, los usuarios podrán acudir tanto a una sede del Banco de España, para lo que hace falta cita previa, como a una entidad bancaria. Sea uno u otro lugar, es recomendable acudir con el Documento Nacional de Identidad (DNI).
Los deterioros más comunes son cortes, manchas de tinta, haber lavado el billete en la lavadora o cambios en su color. Eso sí, si en el Banco de España o en la sucursal bancaria a la que se lleve el billete detectan que el deterioro del mismo puede haber sido provocado intencionadamente podrían retener el dinero y no devolverlo hasta hablar con las autoridades.
Según un estudio reciente del Banco de España sobre Hábitos en el Uso del Efectivo, el efectivo es el medio de pago más utilizado por los españoles entre particulares y en comercios.
Bien es cierto que el uso diario de efectivo ha ido disminuyendo poco a poco en los últimos años, pasando del 65% en 2023 al 57% en 2024.
Como es lógico, son las personas de 65 años en adelante los que más efectivo usan, aunque el efectivo se impone en cualquier franja de edad, estando por debajo del 40% en jóvenes de entre 18 y 34 años. El lugar de residencia también influye, puesto que el uso del efectivo es mucho mayor en ciudades por debajo de los 5.000 habitantes.