José Antonio Rivero4 min lecturaEl Sevilla FC no gana para disgustos. Este martes se producía el terremoto Kike Salas. La policía se presentó en el entrenamiento del conjunto nervionense para llevarse al canterano, a quien tomó declaración y luego dejó en libertad, todo por su presunta implicación en un caso de apuestas ilegales.
Desde el club condenaron "cualquier conducta fraudulenta" en el deporte, aunque también resaltaron su "total respeto al principio de presunción de inocencia" de su futbolista.
Uno de los juzgados de Morón, ciudad natal del jugador sevillista, investiga la presunta implicación de Kike Salas en una trama que obtuvo ganancias en las apuestas a raíz de unas tarjetas amarillas que él habría forzado que le mostrasen en la recta final de la pasada temporada.
Este miércoles se conocía otra denuncia en la que estaba involucrado el conjunto nervionense, aunque en esta ocasión su implicación era todavía más indirecta que en el caso de Kike Salas.
La asociación de consumidores Facua ha denunciado a la marca de ropa deportiva Castore, encargada de vestir al Sevilla FC, por la cancelación de un gran número de pedidos de camisetas realizados por seguidores sevillistas. Según la citada asociación, los pedidos se hicieron durante el periodo de Black Friday, por lo que tenían unos grandes descuentos aplicados, pero la empresa ha decidido anular muchos pedidos.
Algunos de los usuarios de la marca deportivo sí que recibieron sus camisetas, con un precio de 30,50 euros (gastos de envío incluidos), la inmensa mayoría de compradores está recibiendo un correo electrónico en el que le informan que el pedido ha sido cancelado de forma unilateral por Castore.
Lo más rocambolesco es que Castore está devolviendo el dinero de la camiseta, pero no los cinco euros de gastos de envío que los compradores pagaron en su momento.
La empresa de ropa deportivo alude a esta cancelación unilateral de los pedidos "para evitar más retrasos con los artículos ante baja disponibilidad de stock", lo que Facua considera una excusa y algo en contra de la ley.
Desde la asociación de consumidores exige a Castore que "proceda a la inmediata entrega de las camisetas del Sevilla Fútbol Club a todos aquellos usuarios que las hayan comprado, por el precio de 30,50 euros cada una (gastos de envío incluidos), y que no hayan manifestado su voluntad expresa de no recibirlas, además de que se comprometa a pedir disculpas a todos los consumidores afectados por su conducta".
El artículo 61.2 del Real Decreto Legislativo 1/2007, de 16 de noviembre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios y otras leyes complementarias, estipula que "el contenido de la oferta, promoción o publicidad, las prestaciones propias de cada bien o servicios, las condiciones jurídicas o económicas y garantía ofrecidas serán exigibles por los consumidores y usuarios, aun cuando no figuren expresamente en el contrato celebrado o en el documento o comprobante recibido y deberán tenerse en cuenta en la determinación del principio de conformidad con el contrato".