Su precio de partida no es un chollo, pero Campaña es algo más que un fichaje para el Sevilla. Se trata de la perla de la cantera, del hijo pródigo que prometía comandar al equipo de Nervión durante muchos años, pero que tuvo que salir para foguerarse y ahora poder regresar al nivel que todo el sevillismo soñaba.
Con el centrocampista sevillano, Monchi mataría varios pájaros de un tiro: encontraría un jugador que puede ocupar varias posiciones en el centro del campo, que conoce la casa, la quiere, está adaptado a Sevilla, deseando volver y que podrá inscribir en Europa como canterano, ampliando unas opciones que todos los años quedan algo cortas. Y metería sevillismo en un vestuario en el que a veces hace mucha falta.