ENTREVISTA ED

El bronce olímpico de triatlón Jairo Ruiz revela el motivo de su retirada

Tres meses después de haber tomado la decisión, el triatleta conversa con ESTADIO Deportivo en una entrevista donde relata las dificultades que le impidieron dilatar su continuidad en la élite

Iván DíazIván Díaz 6 min lectura

Jairo Ruiz alargó su retirada del deporte de élite hasta los 36 años de edad. Después de una progresión astronómica, el joven nadador ascendió al olimpo de la historia del deporte paralímpico tras subir al podio en unos Juegos Olímpicos. Fue la primera medalla para España en esta disciplina, lo que colorea con más fuerza el tono histórico de esta proeza. Meses después, con un amplio palmarés plagado de metal, el almeriense dijo adiós a la competición con una decisión meditada, causada por la desmotivación de ver que su cuerpo de poderes extraordinarios, comenzó a perder la efervescencia que le impulsaba a llegar a la meta. En una entrevista con ESTADIO Deportivo, plagada de naturalidad y realismo, relata los compases de este difícil proceso.

El hecho de que atienda a esta llamada desde un gimnasio dice mucho del lugar que ocupa el deporte en la vida de Jairo: "Yo creo que voy a hacer deporte toda mi vida, si la salud me lo permite. Ahora estoy dándole más prioridad al gimnasio más que a las otras tres disciplinas que componen el triatlón, porque me apetecía un poco. Pero siempre haré deporte, aunque lo único que he dejado es de competir, pero de entrenar nunca se deja".

En el origen de la decisión, las lesiones: "Es una decisión que la mayoría de los deportistas tomamos, digamos, obligados. No es porque nosotros queramos. En mi caso, como en la mayoría de los compañeros, creo, ha sido un poco por las lesiones y porque ya el cuerpo no aguantaba ese ritmo de entrenamiento, viaje, competición. Y al no poder llevar ese ritmo, cuando llega a las competiciones las cosas no salen. Aquí milagros no hay, si no entrenas lo que toca y lo que corresponde, muy difícilmente podrás estar al nivel de los compañeros que van a estar allí. Entonces ya llega un punto en el que no me sentía motivado. A mí no me gusta ir a las carreras sabiendo que no he entrenado lo que hay que entrenar".

Sobre las fases de ese proceso, el orden cronológico no tiene secretos: "Te vas dando cuenta poco a poco. Vas viendo que te lesionas, te recuperas y vuelves y así, pero cada vez tardas más en volver hasta que llega un punto en el que ya no estás al 100%. Yo cuando ya tenía el alta y entrenaba con normalidad, no podía entrenar todo lo que yo sabía que era necesario. Ya después de tantos años de experiencia y de haber estado en dos Juegos y con muy buenos resultados, sobre todo en el 23 y en el 24, ya veía que no estaba entrenando ni de lejos lo que yo entrenaba, por ejemplo, en 2019 o en 2020. Y, por supuesto, los resultados de las competiciones y mis rendimientos también estaban lejos de aquellos años".

Aquí aparece el planteamiento: "Ahí fue ya cuando empecé a pensar que ya se estaba acabando. No pasa nada. Ya fui consciente de que llevo muchos años y que eso tenía que pasar en algún momento. Y ahí es cuando empezamos a decidir si merecía la pena intentar seguir hasta los Juegos de París".

Si bien, sacó fuerzas de flaqueza y clasificó para las terceras olimpiadas: "La clasificación, que iba a ser algo muy complejo se pudo conseguir. Estuve allí. Fue una clasificación súper difícil para mí. Por esto que decimos, estaba enfrentándome a compañeros que entrenan al 100% cada día, un día detrás del otro, durante muchos meses seguidos. Y es muy difícil competir contra esos si no puedes hacer lo mismo que ellos".

En su entorno, no lo creían: "Sí, aún todavía mucha gente me dice, bueno pues descansa un tiempo y luego vuelves. Yo sé que desde fuera las cosas se ven muy diferentes. Y bueno, por supuesto hay gente que me quiere mucho, que me aprecia. Y que como saben que es algo que me encanta, pues a ellos les gustaría que yo siguiera. Lo dicen con toda su buena fe. Pero cuando estás dentro, cuando lo vives, realmente eres consciente de lo que eso supone. Y es que no puedo. Ojalá pudiera decir otra cosa. Cuando acabó el Mundial de Torremolinos, que fue mi última prueba como atleta internacional, lo dije en la entrevista. Ojalá pudiera deciros que estoy muy contento y que voy a seguir. Porque sí que estoy muy contento. Pero es que no puedo. Físicamente no aguantaría una temporada de entrenamiento de alto nivel. Sé que no, sería totalmente imposible. Me lesionaría varias veces. Y entonces no habría resultado".