ENTREVISTA ED

Alberto Amezcua: "La marcha atlética es un deporte complejo que merece ser más reconocido"

Alberto Amezcua, de 32 años, es uno de los atletas de marcha más destacados de España. Desde los 10 años ha perseguido su sueño olímpico, pero aunque logró clasificarse, no pudo competir en los últimos Juegos. A pesar de esta desilusión, es un referente en Andalucía y un modelo a seguir para jóvenes en Guadix, Granada. En una entrevista con Estadio Deportivo, Alberto reflexiona sobre su carrera

Elena GuerraElena Guerra 10 min lectura

-¿Cómo decidiste dedicarte a la marcha, una disciplina que tantas alegrías te ha dado a lo largo de tu vida? ¿Hubo algún momento o persona que te inspiró a tomar este camino?

-Soy de Guadix, de la provincia de Granada, y aquí, la marcha atlética ha sido el deporte rey por excelencia. Muchos pioneros han dejado su huella, como Manolo Alcalde, quien participó en dos Juegos Olímpicos y fue el entrenador de grandes marchadores como Paquillo Fernández, subcampeón olímpico y mundial. Conocí la marcha atlética un día en una clase de educación física en mi colegio, donde tanto Paquillo Fernández como mi actual entrenador, Jacinto Garzón, nos dieron una charla sobre la disciplina y nos invitaron a probarla en las pistas de atletismo. Mis amigos y yo decidimos ir y, al probarla, me enganché. Lo que me atrajo de la marcha fue la complejidad que implica: no solo hay que ir rápido, sino que también hay que cumplir con una serie de reglas, y si no lo haces, los jueces te penalizan. Esa complejidad me llamó la atención y me hizo inclinarme por esta disciplina, especialmente teniendo como referencia a Paquillo Fernández, una figura importante en el deporte español de aquel entonces.

-¿Qué significa para ti representar a Guadix en competiciones internacionales?

-Ha sido un gran orgullo. Desde que empecé en la marcha atlética con 10 años, he permanecido en el club de juventud atlética de Guadix, a pesar de recibir ofertas de otros clubes. Mi amor por mi ciudad y mis raíces me ha llevado a seguir en el club. Para mí, ha sido un privilegio llevar el nombre de Guadix en campeonatos del mundo, europeos y Juegos Olímpicos. Es un orgullo poner a Guadix en el mapa. Además, me gustaría ser un referente para los jóvenes de mi localidad, así como Paquillo lo fue para mí. He intentado acercar la marcha atlética a los colegios, ya que creo que es una disciplina muy bonita, aunque poco conocida, que ha dado muchos éxitos y alegrías al deporte español y que debería promocionarse más.

-Fuiste uno de los atletas convocados para los Juegos de París, aunque finalmente no pudiste participar. ¿Cómo fue ese sueño de acudir a unos Juegos, lo más importante para un deportista?

-Era mi última oportunidad de asistir a unos Juegos Olímpicos. Me había quedado a las puertas en las ediciones de 2016 y 2021, y sabía que esta era mi última ocasión, ya que hasta 2028 no podría continuar en la alta competición. Desde que empecé a los 10 años, siempre soñé con representar a mi país en unos Juegos. Fue una experiencia inolvidable, aunque agridulce. Me había ganado mi lugar en función de mis méritos, pero, lamentablemente, las decisiones a veces no son justas. Me comunicaron solo tres días antes de la prueba en la Villa Olímpica que no competiría y que quedaría como suplente. Fue un jarro de agua fría, ya que había demostrado estar en muy buena forma y preparado para hacer algo grande en esos Juegos. Me quedé en shock al no entender la razón de esa decisión, que consideraba injusta.

-¿Crees que este ha sido el mayor obstáculo que has tenido a lo largo de tu carrera?

-No diría que es el único obstáculo. A lo largo de mi carrera he pasado por muchos momentos difíciles que he tenido que afrontar. Esta última decisión fue duro de aceptar, especialmente porque llegaba en un estado de forma excelente y con aspiraciones de lograr algo significativo. Sin embargo, he enfrentado otros desafíos, como mi alergia en primavera, que siempre me ha afectado. Muchas veces, he llegado a competiciones importantes en condiciones físicas mermadas. A pesar de estas dificultades, he logrado alcanzar mis objetivos y estoy orgulloso de mi trayectoria, aunque siempre aspiremos a más.

-¿Has sentido siempre el apoyo de tu equipo y de Guadix a lo largo de tu carrera, especialmente tras regresar de los Juegos Olímpicos?

-Sí, afortunadamente tengo una familia que me ha apoyado en todas mis decisiones deportivas. También tengo un entrenador que es más que un mentor; es un amigo y un hermano mayor. Comencé con él a los 10 años, y hemos vivido juntos 22 años de carrera, con momentos buenos y otros no tan buenos. Siempre ha estado a mi lado, inculcándome valores y enseñándome a ser fuerte. He sentido el apoyo de Guadix, especialmente después de la injusticia de no poder participar en los Juegos. Recibí mucho cariño de la gente de aquí.

-¿Cómo ha evolucionado tu percepción sobre la marcha a lo largo de los años? ¿Qué cambios has visto en la disciplina y su popularidad?

-La marcha atlética es una de las disciplinas más difíciles y duras, y creo que es muy atractiva para el público, especialmente en televisión. He visto cambios, pero también creo que hay que ser críticos. Las reglas han cambiado y se están permitiendo cosas en el juzgamiento que antes no se permitían, lo que obliga a los deportistas a reinventarse. La tecnología también debería entrar en la marcha atlética, como ha sucedido en otros deportes, para hacerla más justa. Siempre ha sido subjetivo, dependiendo de la visión de cada juez, y creo que la tecnología podría ayudar a resolver eso.

-¿Qué papel juega el apoyo de la Junta de Andalucía en el desarrollo de nuevos talentos?

-Es fundamental. No debemos conformarnos, siempre hay que aspirar a más. A menudo, buscamos patrocinadores privados y nos encontramos con negativas. Los deportistas debemos ser una imagen de valores de sacrificio y salud para la sociedad. Necesitamos recursos y patrocinios para poder relanzar nuestras carreras y afrontar los gastos que implica el deporte de alto nivel. Agradezco las ayudas que ofrece la Junta de Andalucía y la Fundación Andalucía Olímpica, que han apostado por el deporte y están ayudando a muchos deportistas, tanto profesionales como aquellos que están comenzando.

-¿Qué consejos le darías a alguien que quiere empezar en la marcha atlética o cualquier deporte?

-Lo más importante es disfrutar lo que hagan. La sociedad actual busca resultados inmediatos y se frustra fácilmente. Es fundamental entender que todo requiere tiempo, sacrificio y esfuerzo. Personalmente, he tenido una carrera exitosa, pero no ha sido fácil. He enfrentado muchos desafíos y momentos difíciles. Lo que les transmitiría es que sean perseverantes, que no se rindan ante la primera dificultad, porque eso es lo fácil. En mi caso, para cada carrera buena, he tenido seis malas. La vida es así: se trata de levantarse y aprender de los errores.

-¿Cómo te ves dentro y fuera de la pista? ¿Te gustaría lograr algo antes de terminar tu carrera?

-A priori, tengo claro que este será mi último año en la alta competición. Sin embargo, si hago un buen año, podría replantearme continuar. Quiero enfocarme en mi vida fuera del deporte y estoy opositando para la policía local. Busco estabilidad, ya que en deportes minoritarios como el mío no la tenemos. Con la edad que tengo, quiero empezar una nueva etapa, aunque siempre estaré vinculado a la marcha atlética. He sacrificado mucho por esta disciplina y quiero seguir aprendiendo, tal vez como entrenador.

-¿Cuáles son tus próximas competiciones?

-Dentro de dos semanas tengo el campeonato de España, pero lamentablemente no llegaré en las mejores condiciones. He estado lidiando con una lesión que ha afectado mi entrenamiento. Después de los Juegos Olímpicos, el estrés físico y mental ha agravado mi situación. He estado haciendo trabajos alternativos y ahora estoy volviendo a la marcha, pero con bajas expectativas para el campeonato. Mi prioridad es recuperarme bien y, a partir de ahí, ir afrontando las competiciones que vengan.