Con dos jornadas por delante con poco más en juego que la dignidad y poder escalar apenas un puesto en la tabla,
el Betis ya piensa en el futuro. Este lunes se presentará oficialmente a
Manuel Pellegrini, que ya lanzó un ambicioso mensaje al beticismo, como
nuevo entrenador del conjunto verdiblanco
para las tres próximas temporadas. Y seguidamente, en las próximas semanas, comenzarán a producirse los consiguientes movimientos en
una plantilla que tampoco sufrirá una revolución, como pedían otros técnicos tanteados.Sí se da por hecho que habrá cambios en la defensa. Y el primero puede ser
la salida de Zou Feddal, la cual da por hecha el prestigioso diario
‘A Bola’, que lleva al central a su portada para asegurar que “Feddal ya no se escapa”, anunciando así que ya existe un acuerdo con el Betis (con el jugador ya lo había) para un traspaso por el que
el Sporting de Portugal abonará unos tres millones de euros. Una cantidad importante por un jugador de 31 años, que costó 2,5 kilos hace tres años, y que en realidad s
e deduciría de lo que aún queda por abonarle al club lisboeta del fichaje de William Carvalho, según Mundo Deportivo.
Según indica el rotativo portugués,
Feddal firmará un contrato de cuatro temporadas y su fichaje se anunciará de forma oficial una vez que acabe LaLiga, algo que ocurrirá el próximo domingo. Sin duda, una operación beneficiosa tanto para el Betis como para un jugador que ha vuelto a recobrar protagonismo con Alexis y que verá incrementado su sueldo para percibir
un millón de euros netos por temporada. En la tarde del domingo, según el diario
'Récord', los clubes (representados Federico Martínez Feria y Hugo Viana) seguían
discutiendo las
formas de pago y detalles como la inclusión de
bonus por rendimiento del zaguero y por los logros del club luso, aunque el trato parece más que encaminado y sólo restaría el
cruce de documentación.
Con la marcha de Feddal, que ha participado este curso en
17 partidos (seis de ellos tras el parón), el Betis activará su vez la búsqueda de un central que aporte la necesaria contundencia a una zaga necesitada de esa cualidad, surgiendo ya para ello
la opción del uruguayo Cabrera, accesible tras el descenso a Segunda del Espanyol.