Dallas está manos a la obra. Aunque la campaña 2023-24 va por muy buenos derroteros para los de Texas, que actualmente ocupan la tercera plaza de la Conferencia Oeste con 16-9, eso no quiere decir que tengan la más mínimo intención de relajarse; tanto es así que según informa James L. Edwards III de The Athletic, los Mavericks tendrían puesto el punto de mira sobre el que sería sin duda un sorprendente fichaje para Luka Doncic.
El equipo dirigido por Mark Cuban tiene claro que adolece de fortaleza interior, por lo que sumar piezas de valor a su frontcourt es una necesidad; más aún viendo los problemas físicos que está sufriendo el pívot novato, Dereck Lively II, quien ahora tiene lastimado un tobillo. Así, los Mavs tendrían mucho interés en Isaiah Stewart, center de los Detroit Pistons, así como en otra pieza que tras ser varias veces All-Star tiene su futuro en el aire. ¿De quién hablamos? De Draymond Green.
Así es. Aunque es pronto para que se pueda dar un traspaso, ya que el jugador de Golden State fue suspendido indefinidamente por su agresión a Jusuf Nurkic, en Dallas han colocado su foto sobre el tablón para seguir detenidamente qué ocurre con uno de los grandes hacedores de esos Warriors de leyenda que han conseguido hasta cuatro anillos de campeón de la NBA.
Cuando decimos que es pronto nos ceñimos a la realidad de Green. Aunque es una opción real que la organización de California acabe optando por darle salida a través de un intercambio, no lo es menos que según ha adelantado hoy mismo Shams Charania de The Athletic, el jugador se enfrenta a lo que serán tres semanas de asesoramiento para solucionar su problema de comportamiento sobre el parqué, el cual atañe directamente a la reincidencia en acciones antideportivas que ponen en peligro la integridad física de sus rivales.
La realidad es que a Green le queda un largo camino de trabajo junto a la NBA y los Warriors, quienes seguirán y dirigirán su terapia de las próximas semanas para que esta sirva para su reinserción en la Liga siendo un jugador diferentes; y es que tal y como dijo su head coach, Steve Kerr, Draymond ha cruzado la línea con sus acciones y ahora le toca reconducir no solo su comportamiento de cara a su carrera, sino también a llevar una vida ordenada y sana. Por cierto, si se confirman estas tres semanas de trabajo al margen de las canchas, eso significaría que su suspensión se extendería durante aproximadamente 12 partidos.