Alvaro Arenillas3 min lecturaGolden State Warriors sigue en su línea ascendente desde la llegada de Jimmy Butler (16-3), pero lo cierto es que el triunfo de anoche ante Toronto Raptors por 117-114 les ha podido salir muy caro. ¿A qué nos referimos? A la lesión sufrida por Stephen Curry.
El ganador de cuatro anillos se vio obligado a abandonar la cancha en el tercer cuarto del partido al sufrir una fea caída que le causó una contusión pélvica, tal y como informó la propia franquicia de San Francisco.
Respecto a la jugada en cuestión, con 3:32 minutos por jugarse del tercer cuarto Curry realizó una penetración en la que terminó siendo golpeado para chocar con dos jugadores del equipo canadiense justo cuando pasaba el balón a Jonathan Kuminga para un triple desde la esquina. Desequilibrado, cayó con fuerza de espaldas al suelo.
Nada más caer los gestos de dolor de Curry no se hicieron esperar. Ahí, tendido sobre el parqué fue atendido por los servicios médicos del equipo. Posteriormente, ya incorporado, abandonó la pista con cuidado para primero sentarse en el banquillo del equipo y finalmente marcharse a vestuarios.
Dada la cercanía de los playoffs la preocupación por el estado físico de Curry es obvia. Estas son las palabras de su entrenador, Steve Kerr, a la finalización del encuentro mientras el base se estaba realizando una resonancia magnética. "Pensó que podría volver al partido. Simplemente decidimos no arriesgarnos. Así que, esperemos que no sea grave", señala.
En una línea parecida a la del técnico se mostró Draymond Green, quien también espera que todo quede en un susto. "Fue un momento aterrador. Golpeó el suelo con fuerza. Se pudo oír el golpe. podía oír. Fue una locura. Obviamente, un momento muy aterrador para nosotros y para él. Ojalá esté bien", sentencia.
Después de hasta siete partidos consecutivas en casa, ahora a los Warriors les toca estar un tiempo en la carretera para disputar hasta seis encuentros en línea. Empezarán el sábado visitando a los Atlanta Hawks y continuarán jugando contra Miami Heat, New Orleans Pelicans, San Antonio Spurs, Memphis Grizzlies y Los Angeles Lakers.