Ser tres veces MVP de la NBA significa que has dominado la fase regular de la NBA con mano de hierro y que probablemente seas el mejor jugador de la competición, pero eso Nikola Jokic lo lleva a otro extremo. El pívot serbio llegó por la puerta de atrás a la liga y en los años que lleva ha convertido a los Denver Nuggets en el mejor equipo del oeste y actuales campeones. Y eso que no parece que tenga un físico hercúleo ni el más idóneo para el baloncesto, pero lo compensa con una inteligencia superior y manejando los tiempos como nadie, hasta el punto de lo que ha conseguido en estos playoffs de 2024.
Y es que los Minnesota Timberwolves les habían dado una lección a los de Colorado en los dos primeros partidos en Denver, pero tras eso, el 'Joker' se puso el traje de trabajo y ha conseguido darle la vuelta a la serie, hasta el punto de ahora mismo están a un paso de acceder a la final de Conferencia, para lo que tendrán que ganar en Minneapolis.
El serbio lució su versión más contundente en la vuelta a casa y destrozó a los Timberwolves con 40 puntos y trece asistencias para dar a los Denver Nuggets una victoria en casa por 112-97 que les deja a un triunfo del pase. Ante la mirada del comisionado de la NBA, Adam Silver, los vigentes campeones tumbaron a los Wolves por tercera vez consecutiva, en el primer partido de toda la serie que conquista el local. Tras las dos primeras victorias, logradas además a domicilio, se ilusionaron a los Wolves, pero la reacción de los Nuggets ha sido brutal.
Jokic recibió el premio MVP de la mano de Silver y lo celebró firmando 40 puntos y quedándose a solo tres rebotes del triple-doble, y lo mejor, sin perder balón alguno y con un 68% de tiro de campo. Es el segundo jugador capaz de lucir números de este nivel en los 'playoffs' tras Chris Paul.Fue protagonista con unas jugadas extraordinarias, incluido un triple ante el punteo del francés Rudy Gobert, el mejor defensa de la temporada, que dejó boquiabierto al público. La sorpresa inesperada de los de Mike Malone fue de nuevo Aaron Gordon le apoyó con un doble doble de 18 puntos y diez rebotes, pero el que estuvo menos fino fue Jamal Murray que se quedó en 16 puntos.
En los Wolves, ante un flojo partido de Anthony Edwards, que 'solo' metió 18 puntos y dio nueve asistencias, se erigió como el líder el dominicano Karl Anthony Towns que se fue hasta los 23 puntos, mientras que acusaron la baja de su base titular, Mike Conley, por molestias en el tendón de Aquiles. En la madrugada del jueves al viernes se puede acabar la serie, si los de 'Minny' no hacen la machada de forzar el séptimo.