Alvaro Arenillas4 min lecturaNoches como esta en la NBA explican muchas cosas. Bueno, el que las explica es un Nikola Jokic que tras cinco partidos ausente ha saltado al parqué para volver a lo grande y de paso señalarnos qué es que realmente LeBron James. Porque si el genio serbio es el mejor del momento, ello no deja de recordarnos que El Rey vive en esa eterna tiranía de más de 20 años que ha roto registros por doquier y, anoche, el corazón de Indiana. Sí, uno es el mejor ahora y otro puede serlo perfectamente de todos los tiempos.
Pero vamos por partes. Lo primero es hablar de un Jokic de auténtica locura, uno que no entiende de periodo de aclimatación o de coger del ritmo, uno que simplemente salta a la cancha y juega como el mejor del mundo. No exageramos. Puede que este año no se lleve el MVP –ya tiene tres y Shai Gilgeous-Alexander también es un jugador inmenso–, pero hacer de un partido de 39 puntos, 10 rebotes y 10 asistencias algo casi rutinario se sale de toda lógica.
Con el genio serbio a tal nivel, Denver se impuso a unos Milwaukee Bucks que llegaban en cuadro por las bajas de Damian Lillard, quien no se sabe cuándo podrá volver a causa de un coágulo sanguíneo, y de Giannis Antetokounmpo, por una lesión leve. Ante tal contexto, los de Colorado aprovecharon para ganar y acercarse a la segunda plaza de la Conferencia Oeste, quedando a 1.5 partidos de Houston Rockets.
Y también en esa pelea están los Lakers gracias a LeBron James. Los de oro y púrpura tuvieron un partido durísimo en cancha de los Indiana Pacers, pero en esas apareció un eterno LeBron James para palmear un balón sobre la bocina que sellaba el triunfo de los suyos por 119-120. Porque sí, una de las grandes diferencias entre ganar y perder en la NBA es El Rey. Con dicha victoria, los de oro y púrpura también se mantienen en la lucha, ya que están solo un partido por detrás de los Nuggets.
Acaben como acaben los Lakers esta temporada, una vez más hay que quitarse el sombrero con LeBron James. A sus 40 años está promediando 24,9 puntos, 8,1 rebotes y 8,4 asistencias. ¡Bendita locura!
La ausencia de Jayson Tatum, baja por una lesión en el tobillo izquierdo, no frenó a los Celtics, que se pasearon en cancha de los Suns para blindar su segunda plaza en el Este y mantener la presión sobre los Cleveland Cavaliers. Tatum estuvo sentado en el banquillo de los Celtics llevando una camiseta y gorro de su universidad, Duke. Se espera que 'JT' vuelva al quinteto de Boston el sábado contra los San Antonio Spurs. El quinteto titular de los Celtics acabó con más de diez puntos, liderado por los 30 puntos de Kristaps Porzingis. Jaylen Brown aportó 24 puntos.
Phoenix Suns 102-132 Boston Celtics
Indiana Pacers 119-120 Los Angeles Lakers
Denver Nuggets 127-117 Milwaukee Bucks
New York Knicks 113-126 Los Angeles Clippers
Brooklyn Nets 86-116 Toronto Raptors
Philadelphia 76ers 114-119 Washington Wizards