No hace mucho tiempo Los Angeles Lakers tenían un 'trauma' con los Denver Nuggets y perdían en cada ocasión en la que se veían las caras, pero ese tiempo parece haber quedado en la historia. Pese a seguir sin contar con LeBron James, con un Reaves en plan 'ametralladora' cuando tiene espacios y un Luka Doncic a su nivel de casi siempre, el equipo de Los Angeles se pudo permitir, incluso, no contar con el esloveno en el último cuarto y, pese a ello, ganar cómodamente por 120-108. Los Lakers logran superar así a su gran rival en la tabla y vuelven a estar entre los tres mejores equipos del Oeste.
Cierto que a los Nuggets también les faltaban el serbio Jokic y el canadiense Murray, pero el potencial ofensivo que ofrecieron los Lakers en el primer cuarto es difícil de igualar. El equipo angelino firmó un brutal primer cuarto, rematado con 46 puntos (46-29), lo que supone la mayor cantidad de puntos que el equipo ha anotado en cualquier cuarto esta temporada. Encestaron nueve triples, igualando además la mayor cantidad de triples en un cuarto en la historia de la franquicia, además de acertar el 69,6 % de los tiros de campo. Y el gran protagonista fue un Doncic que acabó con 21 puntos y 3 asistencias en esos doce primeros minutos.
Los Lakers no se detuvieron ahí, firmaron un 73-59 al descanso y apretaron en el tercer cuarto para dejar sentenciado el partido. De hecho, alcanzaron los 30 puntos de ventaja en el arranque del último periodo, ya sin Doncic en pista, que se pudo permitir descansar todo el último cuarto. En total, Luka Doncic jugó 32 minutos y acabó con 31 puntos (10 de 21 en tiros con 4 de 9 en triples), 9 rebotes y 7 asistencias. Austin Reaves, en su línea de los últimos encuentros, le respaldó con 22 y 8 asistencias.
Reaves está siendo el gran beneficiado, en ausencia de LeBron James, de los espacios que abre Luka Doncic, con las defensas que soporta y con sus penetraciones. "Creo que cuando penetro, todos en la cancha se benefician, así que quería empezar así hoy. No es una estrategia. Es simplemente lo que te da la defensa. En el primer cuarto, simplemente cambian de estrategia y me dejan jugar uno contra uno, así que sé que en algún momento van a doblar. Diría que es mejor que juguemos cuatro contra tres y lo estábamos haciendo genial. Así es el partido", señala un Luka Doncic cuya influencia en el juego de los Lakers ya se nota.
Sin embargo, el esloveno pasa página y ya piensa en seguir avanzando. "Como equipo y como jugador, hay que prepararse para el próximo partido. Creo que hay que prepararse para lo que viene y para el futuro", avisa.
Su entrenador de Los Angeles Lakers, J.J. Redick, se mostraba encantado de esta actitud y le pide que siga siendo agresivo en el juego "pase lo que pase". Redick destacaba del esloveno "la forma en que les está metiendo tiros" a sus compañeros y cómo sabe salir ante los problemas que le crean. "Realmente, no está forzando las cosas cuando están haciendo doble marca, simplemente está dejando que el juego se presente por sí solo", señaló el entrenador de los Lakers al termino del partido.