Alvaro Arenillas3 min lecturaNo es momentos para sustos. Algo así han debido pensar esta noche en los Boston Celtics, actual campeón de la NBA que se ha visto como su gran estrella, Jayson Tatum, se veía obligada a abandonar la cancha a causa de una lesión en su tobillo izquierdo.
Corría el tercer cuarto del partido contra Sacramento Kings cuando tras lanzar un triple Tatum aterrizaba sobre un pie de Domantas Sabonis. Nada más caer el alero quedó tendido sobre el parqué con ostensibles gestos de dolor. El jugador de los californianos fue castigado con la señalización de una falta flagrante tipo 1, mientras que el jugador franquicia de los verdes terminó levantándose para lanzar dos tiros libres y marcharse a vestuarios.
Por el momento se desconoce el alcance de la dolencia, pero el entrenador de la organización de Massachusetts, Joe Mazzulla, se muestra optimista respecto a que su jugador no esté demasiado tiempo alejado de las canchas. "Parece que está bien. No vi la jugada, pero los árbitros acertaron. Qué suerte que pudiera lanzar los tiros libres. Ahora mismo ya se está ocupando de ello (su lesión)", expresa.
Ya concluido el partido con victoria de Boston por 95-113, los medios tuvieron acceso a vestuarios y pudieron hablar directamente con el jugador. Tatum, quien terminó con 25 puntos y cojeaba con cuidado por el vestuario de los Celtics tras el encuentro, le comentó a Ramona Shelburne de ESPN que el tobillo "solo le duele", pero que el equipo "va a ser cauteloso".
El gran miedo tras verle retorcerse de dolor sobre la pista es más que lógico. Estando ya en las postrimerías del mes de marzo, la cercanía de los playoffs obliga a cuidarse al máximo para evitar lesiones que puedan dar al traste con el trabajo de todo un año. Así, no extraña que Tatum hable ya de que el plan del equipo sea ser cautos, ya que toda precaución es poca para el que para muchos vuelve a ser el favorito al anillo.
En todo caso, a estas alturas de la película parece que el susto no pasará a mayores. Ningún periodista ha hecho saltar las alarmas con una posible lesión de importancia de Tatum, y su propio entrenador dijo una vez acabado el choque que el jugador le había transmitido que no existía problema alguno. "Le pregunté cómo estaba y me dijo: 'Bien'. Hará todo lo posible para asegurarse de que mejora", avisa.