Alberto Gálvez3 min lecturaUna nueva derrota del Real Madrid en la Euroliga ha desatado una nueva polémica en el vestuario que dirige Chus Mateo.
El técnico blanco, al finalizar el encuentro, excusó la derrota en el desacierto de sus pupilos desde la línea de tres puntos. El 3 de 26 anotado ante el Panathinaikos cree que les penalizó bastante en un duelo que acabaron perdiendo de quince puntos (85-70): "Anotamos dentro, tuvimos potencia ahí utilizando a nuestros hombres altos, pero a veces necesitas jugar de dentro a fuera y anotar triples abiertos y no lo hicimos en esos momentos. Intentamos volver un par de veces, pero en ese momento nos precipitamos un poco y no anotamos".
Sin embargo, lo peor no fue la abultada derrota sufrida, sino la imagen ofrecida. Sobre todo, entre dos de sus jugadores, Ibaka y Sergio Llull. Ambos evidenciaron que el Real Madrid vuelve a atravesar un momento de tensión y eso se palpó en la pista. Concretamente, antes del descanso, cuando los blancos perdían de nueve en el luminoso (40-31). Un tiempo muerto solicitado por Chus Mateo provocó una pelea verbal en el banquillo. Mientras el preparador madridista discutía con el árbitro principal, Sergio Llull se metió en la conversación y le dijo al colegiado: "Yo no estaba ahí". Fue entonces cuando apareció Ibaka para intentar evitar que a su compañero le pitaran una falta técnica: "Déjale, tío".
Y fue cuando el capitán del Real Madrid, estalló para incredulidad de todos: "Serge, no me toques cuando hablo con los árbitros".
El Real Madrid, con un 3 de 26 en triples que se tradujo en un 11.5% de acierto, firmó su peor noche europea de la temporada en el lanzamiento exterior con motivo de su visita al Panathinaikos en la jornada 28 de la Euroliga y escenificó así uno de los problemas que le está penalizando en este curso.
Solo Llull, en dos ocasiones de ocho intentos, y Hezonja, en una de seis, hicieron diana a lo largo del enfrentamiento. Por lo demás probaron suerte sin éxito Campazzo (0 de 3), Abalde (0 de 3), Musa (0 de 3), Hugo González (0 de 1), Garuba (0 de 1) e Ibaka (0 de 1).
El conjunto blanco acumula en la presente temporada de la Euroliga un 33% de acierto, lo que le hace estar empatado con el París Basketball como el decimoquinto equipo con peores guarismos en este aspecto. Solo el Baskonia con un 32.9%; el Virtus Bolonia y el ALBA Berlín se sitúan por detrás de ellos.