Aún colea el último Clásico entre Real Madrid y FC Barcelona celebrado este pasado jueves en el Wizink Center de la capital. El choque, de Euroliga, se resolvió de lado blanco con sólo un punto de ventaja (65-64). Sin embargo, el encuentro estuvo protagonizado por la polémica y un fallo en el crono que medía el tiempo. Hasta tal punto que el Barça, con un Roger Grimau hiper enfadado, se negó a firmar el acta. Un hecho que podría perjudicar al club azulgrana en su intento por impugnar el duelo.
La jugada en la que el Barcelona se siente perjudicado se produjo a 2:48 para la conclusión del primer cuarto. Jan Vesely tuvo un tiro para poner en ventaja de 10 al conjunto blaugrana, pero los árbitros pararon la jugada después del tiro del checo para revisar la acción debido a problemas con el reloj. Se había detenido varias veces durante la posesión de los de Grimau. Primero se paró a los 2:55 y luego a los 2:52. Razón por la que los jueces decidieron cronometrar la posesión de manera manual para verificar si el tiro entró a tiempo.
Después de minutos revisando la acción, los tres colegiados no sancionaron el disparo en su decisión debido a una violación del reloj de disparo. El dictamen final fue que transcurrieron más de seis segundos antes de que el jugador del Barça anotara. La canasta no fue validada y la posesión para el Madrid. A raíz de aquí, se desató la furia de Roger Grimau que no dejó de protestar durante todo el partido.
Pero, ¿puede impugnar el partido el Barcelona? En principio no podría porque no firmó el acta en señal de protesta. No quedará ahí la intentona del equipo catalán, que enviará un documento a la Euroliga detallando su malestar por el grave error que consideran les costó el Clásico ante el Real Madrid. Está por ver la respuesta del organismo que controla la competición pero no tiene visos de que prospere la queja.
En lo deportivo, los máximos anotadores del encuentro fueron: Gustavo Deck (20 puntos), Poirier (14 puntos), Willy Hernangómez (13 puntos) y Vesely (12 puntos).