Antonio José Medina3 min lectura"Es una ventana muy importante, con un nivel de urgencia entre especial y atípico. Quizá a veces teníamos un poco más encarrilada la clasificación; la clasificación no la tenemos en este caso, y sabemos que de estos dos partidos dependerán buena parte de nuestras opciones de jugar el Campeonato de Europa. Vamos con las ideas claras de que tenemos que prepararnos bien para poder competir el viernes en Bratislava y luego el lunes en Ourense", advertía el seleccionador español de baloncesto, Sergio Scariolo, sobre el doble enfrentamiento ante Eslovaquia que, el viernes y el lunes, podría decidir el futuro de España para próximo el Eurobasket.
El aviso del entrenador italiano parece haber hecho mella en sus jugadores y uno de los pesos pesados de la plantilla, el capitán de Unicaja Alberto Díaz, así lo ha dejado claro. "Estamos preparados para una guerra", advierte el malagueño, que ha tomado la bandera enarbolada por Scariolo y afronta con ilusión ese doble enfrentamiento ante los eslovacos.
"Eslovaquia es un equipo muy peligroso, que tienen a unos bases muy tiradores y que corren mucho". Es un equipo que nos va a exigir el máximo y dos partidos que vamos a tener que estar peleando 40 minutos", advierte a los medios federativos uno de los líderes del vigente campeón europeo. Díaz no quiere confianzas y aprieta a los jóvenes para que se adapten lo más pronto posible a La Familia. "Se están adaptando muy bien. Están preparados y creo que ellos nos van a dar mucha confianza y energía", valoraba.
Alberto Díaz espera que todos estos cambios no les afecten en la regularidad y que se vea a una España reconocible. "En cada ventana hay un plus, hay un extra, hay algo que nos jugamos o que tenemos que tener en cuenta y es cierto que hay un cambio generacional evidente con unos chicos con muchísimo talento que ya han demostrado que compiten al máximo nivel como cualquier otro", añade el andaluz.
Entre los 16 jugadores que empezaron a entrenar este lunes están Izan Almansa (Perth Wildcats), Sergio de Larrea (Valencia Basket) y Rafa Villar (Hiopos Lleida), campeones del mundo sub 19 en el año 2023, a los que los veteranos, como Díaz, están tratando de guiar. Para él, es "un honor y un privilegio" estar en la selección y el equipo debe estar siempre por encima de las individualidades. "Esta es la filosofía del equipo, una filosofía que está por encima de cualquier individualidad", añade el base español, quien ve en este relevo "un primer paso, una primera toma de contacto" de un futuro prometedor para España. "Nos sentimos un poco como padres para que todo vaya bien", reconoce.