Luisma Sánchez3 min lecturaEn el día de ayer, el Barça hacía oficial la llegada de Joan Peñarroya como nuevo entrenador para sustituir a Roger Grimau. El nuevo proyecto azulgrana se espera que sea algo revolucionario después de la temporada actual, donde no han conseguido levantar ningún título. Desde la directiva azulgrana se le dio muchas vueltas para elegir al nuevo entrenador y fueron varias las opciones que se escucharon. Sin embargo, todas ellas fueron cayendo por su propio peso teniendo en cuenta el vestuario que debería dirigir quien viniese.
Se llegó a hablar de la opción de Sergio Scariolo, la cual solo pasó por delante de la mente de muchos aficionados azulgranas que la veían como una ilusión enorme. Aun así, de la que más se llegó a concretar fue de la llegada de Xavi Pascual. El entrenador de Gavà era una de las grandes apuestas de la directiva culé, sin embargo, poco a poco se fue disipando.
¿Por qué? Pues bien parece que uno de los motivos, según señalaba el periodista Xavi Ballesteros en L'Esportiu catalán, tenía mucho que ver con Willy Hernangómez. El exNBA iba a ser uno de los descartes que Pascual proponía al club para hacer una auténtica revolución en su plantilla de cara a la próxima temporada. Desde el Barça apuestan por el internacional español como piedra angular de su proyecto (es el jugador mejor pagado de la plantilla) y por lo tanto, por ahí no podrían ir los tiros. Este era uno de los motivos y viendo los dolores de cabeza que le ha dado a Grimau esta temporada, parece que ambas partes finalmente no terminaron de llegar a un acuerdo.
Llegó al Barça como un fichaje estrella la temporada pasada después de varios años en la NBA. No le hacía falta carta de presentación a Willy Hernangómez, que al igual que su hermano, hizo las maletas para regresar de nuevo a Europa. Sin embargo, el camino de uno y de otro ha sido muy distinto. Mientras que Willy ha estado al parecer un año en la sombra, Juancho se alzó con Panathinaikos ganando la Euroliga y siendo una parte importante de su equipo.
Los problemas con Roger Grimau fueron uno de los motivos del malestar del Barça en esta pasada temporada y es se tradujo en los resultados que obtuvo el equipo. No era ni la segundo ni la tercera opción para el técnico catalán, ni siquiera en partidos importantes, algo que desencadenó una guerra brutal dentro del vestuario. De ahí que Xavi Pascual, con experiencia suficiente, se decantara finalmente por anular la opción del Barça. Comienza la era Peñarroya, también con Willy Hernangómez.