A grandes problemas, grandes soluciones. Algo así han debido pensar en Monbus Obradoiro, un equipo que acumula 10 derrotas consecutivas –exactamente no gana un partido de la Liga ACB desde el 23 de diciembre ante Breogán por 88-90– y que ha anunciado la contratación inmediata del estadounidense Devon Dotson, un jugador con pasado en la NBA y que aterriza para ayudar a la escuadra gallega en su pelea por abandonar los puestos de descenso en la recta final de la fase regular de la liga Endesa.
A sus 24 años, el escolta llega a la competición española tras desarrollar toda su carrera en Estados Unidos. Formado en la Universidad de Kansas, se presentó al draft de 2020 sin conseguir ser elegido, lo cual no evitó que terminase teniendo la oportunidad de firmar un two-way contract con los Chicago Bulls, el cual le valió para debutar en la NBA jugando un total de 22 partidos entre las campañas 2020-21 y 2021-22. En tales encuentros se marchó a un promedio de 2,4 puntos y 1 asistencias en 6,1 minutos por noche. Así lo explica Obradoiro en su comunicado oficial.
“Es un base que cuenta con una trayectoria de tres temporadas en la NBA, donde vistió las camisetas de Washington Wizards y Chicago Bulls. Anteriormente se había formado en la prestigiosa Universidad de Kansas”, destaca la entidad gallega en el texto remitido a los medios.
Más allá de jugar en la NBA, el acuerdo firmado con la franquicia de Illinois le posibilitó igualmente participar en la G League, torneo que disputó en dos ocasiones con los Windy City Bulls, y en última instancia; es decir, en los dos últimos cursos, con los Capital City Go-Go. Ya jugando con la entidad afiliada a los Washington Wizards, destacó al conseguir un promedio de 16,2 puntos, 5 rebotes y 6,2 asistencias por partido.
Volviendo al presente, ahora Dotson afronta su primera experiencia europea con el equipo dirigido por Moncho Fernández, el cual necesita que su aportación sea inmediata si quiere sacar la cabeza del pozo. Su primera parada; es decir, su debut con la camiseta del Obradoiro, tendrá lugar en el trascendental derbi del próximo sábado contra el Río Breogán, un rival directo en la pelea por eludir el descenso de categoría que aventaja en estos momentos en una victoria a los santiagueses. El siguiente partido, también en casa ante el Barça, se antoja bastante más complicado.