Francisco Salas3 min lecturaEl inicio de Paula Badosa en el WTA 1000 de Miami no ha sido ni mucho menos todo lo cómodo que se podía esperar, y no por demérito propio, puesto que sus problemas físicos no han parecido haberla lastrado en exceso, o al menos lo ha disimulado bien, aún en los malos ratos, que los ha tenido. El problema es que se ha encontrado enfrente a una jugadora mucho mejor de lo esperado. La canadiense de 18 años Victoria Mboko, 162 del ranking WTA, se había plantado en el evento habiendo ganado sus 22 últimos partidos, y la número 1 del tenis femenino español ha descubierto por qué.
Tras un primer set muy peleado en el que Badosa ha sido más fuerte en el momento clave, ha llegado el punto de inflexión, que ha sido el segundo parcial. En él la norteamericana ha dado un golpe sobre la mesa, subiendo el nivel de manera abrumadora, cerrándolo por 6 a 1 y llevando el duelo a la tercera y definitva manga. Y entre medias de ese éxtasis de un nivel increíble, la española se ha visto tan superada que se ha puesto a discutir con su entrenador, al grito de "no sé que más tengo que hacer, está jugando mejor que Sabalenka".
Pero a partir de ahí parece que acordarse de su gran amiga y bestia negra le ha dado un impulso, puesto que se ha crecido para en el tercer set y sufriendo de lo lindo, se ha llevado la victoria, demostrando que aunque tengan el día, a las grandes promesas se les puede hacer largo un partido ante una de las mejores del mundo, algo que Badosa sin duda alguna, es.
Una vez que ha certificado, aún con el sufrimiento que lo ha hecho, su partido ante Mboko, Badosa ya puede pensar en lo que le viene por delante. Y eso no es otra cosa que la danesa Clara Tauson, 20º favorita, que ha conseguido una victoria relativamente cómoda ante una jugadora inferior como la austriaca Julia Grabher. Pese a que sobre el papel la escandinava era mucho más superior de lo que se ha visto en pista, luego si que ha tenido que trabajarlo y mucho para cerrar el duelo por 7-5 y 6-4. No está en su mejor momento Tauson, pero la seguridad mostrada en los momentos claves le puede hacer sumar ese punto de moral que le lleve a darle un susto a la española.