Nacho Cartes4 min lecturaEl deporte como la vida, a veces, es imprevisible, pero por norma general suele seguir un patrón. Los favoritos lo son por algo y cuando un jugador de inferior ranking gana a otro mejor situado se suele usar la famosa expresión de 'David vence a Goliat'. No estamos acostumbrados a que ocurran esas sorpresas y si pasan no son tan habituales ni tan seguidas en el tiempo. Eso es lo que está ocurriendo en este Roland Garros, llevamos seis días de torneo en Francia y ya han caído cuatro Top 10.
El último en hacerlo ha sido el ruso Andréi Rublev. Félix Auger-Aliassime, Daniil Medvedev y Jack Sinner ya abandonaron las instalaciones galas en días anteriores. Todos ellos aspiraban a cotas muy altas, siempre por detrás de Carlos Alcaraz y Novak Djokovic, pero se les consideraba como opciones a levantar la Copa de los Mosqueteros. En el caso de Rublev, su temporada en tierra había sido muy buena (ganó en Montecarlo), de ahí la gran sorpresa que ha supuesto su derrota.
Más allá de su nivel de forma y de su ranking, nº7 mundial, su partido frente a Lorenzo Sonego, 47 en la ATP, estaba totalmente controlado. Tanto es así que ha ganado los dos primeros sets. El primero de ellos consiguió llevárselo de forma más sufrida por 5-7, pero el segundo con un rosco, por un contundente 0-6. No se había jugado ni hora y media de partido y ya el ruso tenía pie y medio en octavos de final de Roland Garros.
El italiano, que solo había estado hasta hoy dos veces en octavos de un Grand Slam, no se amilanó y fue ahí cuando empezó a mostrar su mejor juego. Por momentos, Andréi Rublev no encontraba su juego y su rival lo aprovechó para llevarse el tercero por 6-3. Se ajustaba el marcado y también lo hizo la cuarta manga, la más igualada de todas y que se tuvo que resolver en el tie break, y que cayó del lado de Sonego. El italiano, con un gran saque y buscando jugar puntos cortos, hacía daño al ruso. Por su parte, Rublev se llevaba casi todos los puntos con un peloteo largo.
En ese contexto, se llegó al quinto y definitivo set. Ambos estaban fuertes con su servicio y todo hacía indicar que el que cediese un juego al saque dejaría el torneo. Un hecho que terminó sucediendo en el octavo juego. Lorenzo Sonego le rompía el servicio a Rublev y se ponía con 5-3 en el marcador. De esta forma sacaba para ganar y no falló. El italiano estará en octavos de final y continuará su sueño a costa de uno de los favoritos (su primera victoria en un Grand Slam ante un Top 20). Tras el 5-7, 0-6, 6-3, 7-6(5) y 6-3 en 3 horas y 42 minutos ante Andréi Rublev, su próximo rival será Kachanov.