El año 2025 apunta a ser el año en el que cambie todo el paradigma del tenis mundial, pues una vez que los grandes veteranos o se han retirado o han comenzado su declive de forma más abrupta, es el momento de que los jóvenes den un paso al frente y se presenten en sociedad. El que atrae todos los focos es Joao Fonseca, que aunque apenas lleva unos meses en el circuito ya se le puede considerar entre la élite aunque le falten aún algunas pruebas contra mejores; sin embargo, hay otros jóvenes con menos prensa pero también llamados a ser importantes muchos años. Estamos hablando de Jakub Mensik, quien ya está en cuartos de final en Miami.
Con apenas 19 años el checo es el actual número 54 del mundo, aunque el curso pasado llegó a estar el 45, pero esta semana en la ciudadde Florida puede ser la que le consagre y se convierta en uno de los grandes referentes de la nueva generación. Ya dio una de las grandes sorpresas de lo que va a de torneo al ganar al campeón de Indian Wells, Jack Draper, en un apretado partido decidido en dos sets, pero no contento con eso ha seguido avanzando y ya está en cuartos de final.
Eso sí, para acceder a esta ronda ha tenido una pequeña ayuda, pues su rival, otro checo como Thomas Machac, no ha podido saltar a la pista debido a una enfermedad, dejando vía libre al 'niño'. Una lástima, ya que hemos perdido la oportunidad de ver la repetición de un duelo que tuvo lugar hace unas semanas en Acapulco, donde esa vez se impuso la veteranía de Machac.
La frescura extra que va a tener Mensik en octavos va a ser un factor determinante, más aún teniendo en cuenta que pase lo que pase no va a ser favorito, puesto que su rival va a ser el ganador del duelo que cierra esta ronda entre el máximo candidato y primer cabeza de serie, Alexander Zverev, y del, siempre peligroso Arthur Fils, que parece estar haberse adaptado a la perfección a la pista de esta semana. No obstante, más allá de lo que pase, Mensik va a salir de Miami muy reforzado, puesto que en caso de perder sería el 46 de la ATP, a un puesto de su récord, pero en cambio, si es capaz de sorprender y colarse en semifinales, daría un salto aún más alto y llegaría su tope momentáneo.