Antonio José Medina3 min lecturaNovak Djokovic está siendo uno de los grandes nombres propios de este inicio de temporada. Después de que finalizará una temporada sin títulos, por primera vez, desde que saltó al estrellato a mediados de la primera década de este siglo, el serbio se enfrenta a su gran reto: recuperar el terreno perdido y superar a esa generación de jóvenes que parece haber acabado definitivamente con el Big-3 o el Big-4, según se mire.
Roger Federer, Rafa Nadal y Andy Murray ya no están en el circuito y él es el último representante de esa época dorada del tenis. En 2024 se planteó como objetivo ganar el oro olímpico en París y lo logró. No ganó nada más. Pero ahora se ha marcado recuperar el torneo que más alegrías le ha dado, un Open de Australia en el que, aunque lleve tanto tiempo sin ganar nada, debe partir como favorito.
Ni siquiera la última derrota ante el gigante Opelka parece afectarle y lo ha demostrado en la primera prueba que Carlos Alcaraz ha hecho en tierras australianas, donde la pasada madrugada cayó derrotado ante el que fuera su rival en la final de los Juegos Olímpicos de París.
Ya no parece haber discusión sobre cuál es el número uno de la historia del tenis, pero es un debate recurrente que sigue apareciendo de vez en cuando y en el que Djokovic, esta vez, no ha querido entrar.
En un divertido video, le preguntan a Djokovic quienes son para él los GOAT de cada deporte, mientras va sacando pelotas sobre los deportes a los que se requiere su opinión.
Primero sacó la bola del baloncesto y ahí dejo dudas, ya que no se decantó por un solo nombre y señaló a dos: Michael Jordan y Kobe Bryant. Luego le tocó el turno al fútbol americano, donde dejó claro que, para él, Tom Brady no sólo es el jugador con más títulos y el mejor 'quaterback', sino también el mejor de la historia.
En cuanto al golf también lo tenía claro: Tiger Woods. No tan claro lo tuvo en fútbol, donde dejó abierto el mayor debate de las dos últimas décadas al señalar a Leo Messi y Cristiano Ronaldo.
La cuestión fue cuando se llegó al tenis y ahí sí que no se mojó pese a que todo el mundo le señala a él y tiene casi todos los récords en este deporte. Ahí tiró de su lado más bromista y terminó, cual buen gallego, con una pregunta: “Tenis... yo no sé, tú dime”.