Carlos Alcaraz se gustó, disfrutó y, cuando quiso, barrió para superar la tercera ronda del Miami Open 2024. El tenista español superó en una hora y 13 minutos a un Gael Monfils que, por breves momentos, se apuntó al espectáculo, pero que esta vez el gran protagonista del mismo estaba en la otra parte de la red. El 6-2 y 6-4, incluso, pudo ser mucho más contundente si Alcaraz no se hubiera relajado en el tramo final, en el que dio vida a su oponente y, al menos, le permitió maquillar el marcador.
El choque tuvo un claro ganador y un aún más claro dominador. Monfils sólo aguantó el ritmo a su rival durante los cuatro primeros juegos y luego se jugó a lo que el español propuso.
El partido parecía que iba a ser mucho más igualado de lo que finalmente fue con esos primeros juegos en los que todo estuvo muy equilibrado. En ellos, Monfils sacó a relucir su espectacular forma de vivir el tenis y se encontró con un Alcaraz que disfrutaba del planteamiento y se sentía cómodo en ese rol.
La agresividad del francés complicó algo la existencia al español en el cuarto juego, pero más allá de eso, ahí acabó su resistencia. Cuando 'volvió' habían pasado siete juegos, había perdido el primer set, dos de sus saques en blanco y cedía también en la segunda manga por 2-0.
Alcaraz, sin apenas cometer errores, muy solvente con su servicio y devolviéndole todos los saques al francés fue una apisonadora ante la que Monfils apenas pudo oponer resistencia. Cierto que, en el quinto juego, una mala pisada del galo le provocó un dolor en el tendón de Aquiles del que tardó algunos puntos en recuperarse y le hizo perder su saque por primera vez. Pero también lo es que al nivel que estaba jugando Alcaraz era cuestión de tiempo que el español se marchara.
El ritmo que imprimía el tenista murciano lo aguantó Monfils mientras tuvo físico, pero acabó claudicando cuando, ya en el segundo set, lo intentó todo para equilibrar la contienda tras ceder un 'break' inicial y se encontró con un frontón; un Alcaraz que, además, devolvía las bolas dando espectáculo y haciendo que el público se divirtiera.
Con 6-2 y 5-1, todo parecía finiquitado para que el español cerrase el partido, pero se relajó en exceso y permitió a Monfils ganar tres juegos consecutivos y dar emoción a un set y un partido que no habían tenido apenas. Alcaraz tuvo que volver a ponerse serio para cerrar el choque con un juego en blanco.
El tenista español se cruzará este martes, no antes de las 20:30 horas -en España-, ante el ganador del duelo entre el italiano Musetti y el norteamericano Ben Shelton.