Carlos Alcaraz debuta este viernes en el ATP 500 de Pekín ante el joven francés Giovanni Mpetshi Perricard. Lo hace después de convertirse en el héroe de Europa en la Laver Cup y de ser clave en la clasificación de España para las Finales de la Copa Davis.
El tenista español se mostraba encantado y lleno de confianza al llegar a la capital china. Tras su mala experiencia en la gira norteamericana, donde sólo ganó un partido de los tres que disputó y perdió puntos importantes, afronta los dos torneos que va a disputar en Asia con otro talante. "Estoy motivado de hacer este año aquí un buen trabajo. Probablemente éste es uno de los cuadros más duros que puede haber en un torneo 500. Va a ser un desafío difícil para mí llegar lejos en este torneo, pero al mismo tiempo, intentaré disfrutar todo lo que pueda”, señalaba el español.
Tras Pekín llegará el Master 1.000 de Shanghai, pero antes espera avanzar en la capital china y derrotar a un rival de su edad que ha demostrado en esta segunda mitad de temporada ser un enemigo peligroso. Perricard, con sus 203 centímetros de altura, es letal en pistas rápidas, como la de Beijing. Y tiene más recorrido, pues disputó dos partidos a tres sets en Chengdu la pasada semana.
Sin embargo, lo que debería preocupar a Alcaraz es, primero, el poco tiempo de adaptación que ha tenido. Ya lo reconoció él mismo. Las condiciones del viaje y el 'jet lag' no ayudan, pese a que pudo descansar. “Mi viaje desde Berlín fue bastante duro. Volé de Berlín a Frankfurt, después a Dubai y, finalmente, a Pekín. Dormí la mayor parte de los tres vuelos. De Berlín a Frankfurt fue bastante fácil, pues solo fue una hora. Me dormí esa hora. Después de Frankfurt a Dubai fueron unas seis horas y dormí todo el viaje también. Finalmente de Dubai a Pekín fueron otras 7 u 8 horas y me las pasé todas durmiendo. Así que fue un viaje duro, pero al mismo tiempo fácil”, admitía.
Y, más que eso, con lo que debe estar alerta es con lo que le ha ocurrido a casi todos los que estuvieron en Berlín con él. Taylor Fritz, con el que se jugó el punto decisivo en la Laver Cup, ha perdido hoy con Arthur Fils (6-4, 3-6 y 6-3), Stefanos Tsitsipas ha hecho lo propio ante Alex Michelsen (4-6, 6-1 y 6-2), Frances Tiafoe ante Nakashima (7-5 y 6-3) y sólo Ben Shelton, en tres sets, ha logrado sacar adelante el duelo de sacadores frente a su compatriota Opelka (3-6, 6-1 y 6-4).
Todos ellos brillaron en la Laver Cup 2024 y, sin embargo, han caído en su regreso al circuito. Una advertencia para Carlos Alcaraz que también ha visto como Jannik Sinner tenía que sufrir y remontar para sacar adelante su duelo con Nicolás Jarry. Volver a la realidad no es fácil. Y si no, que se lo digan a todos estos.