Ádemás de potenciar la plantilla, como ha hecho con el fichaje de Papu Gómez,
Monchi trabaja desde el inicio del mercado en encontrar destino a futbolistas que no cuentan para Lopetegui para librarse así de sus fichas o, en el caso de
Carlos Fernández, hacer caja. El guzmareño ha sido el primero en salir pero no debe ser el único, pues la intención del club pasa por el adiós del
Mudo y
encontrar acomodo para Gnagnon.
ESTADIO ya desveló cuál era
el plan de Monchi con el francés, que aterrizó en Nervión en el verano de 2018 a cambio de 13,5 millones de euros más 1,5 en variables y siempre ha estado en el ojo del huracán por sus problemas de peso. Pero de momento
el director deportivo no ha conseguido cumplir con lo previsto y la salida del zaguero no termina de desatascarse. El problema radica principalmente en el que los nervionenses pretenden liberarse de la mayor parte de su ficha en caso de cesión y las propuestas que llegan no incluyen este requisito.
Así,
ya han sido varias las puertas que se le han cerrado a Gnagnon hasta el momento, como, por ejemplo, la del Cádiz, que preguntó en Nervión por su préstamo para reforzar la zaga pero, como en verano,
obtuvo una respuesta que sigue sin cuadrar en su margen de maniobra. Probablemente, el Sevilla, ante las dificultades para colocarlo, habrá bajado sus exigencias en cuanto a la ficha, lo que, por ahora, tampoco ha servido para su salida.
Desde Turquía se apuntó en diciembre
el interés del Besiktas, pero no se avanzado en esta vía, y en la planta noble tratan de hallar una solución para un futbolista que en ningún momento ha cumplido con las expectativas generadas por la cantidad desembolsada por su fichaje.
Volver a Francia siempre es el clavo ardiendo al que agarrarse, pues en la cesión en el Rennes el curso pasado cumplió sobre el césped. Está por ver si algún club galo se lanza a por él. De momento, se siguen cerrando puertas.