El Gremio admite "negociaciones" avanzadas por Pepê, al que seguía Monchi

En estos momentos, los esfuerzos de Monchi se centran en cerrar la contratación de Papu Gómez, algo que parece a punto de concretarse. Pero la dirección deportiva del Sevilla FC no sólo trabaja pensando en el presente más inmediato. Son muchos los seguimientos y los nombres apuntandos en la agenda, como es el caso de Eduardo Gabriel Aquino Cossa, conocido como Pepê, al que los técnicos nervionenses vienen siguiendo desde hace tiempo, como desveló ED en abril del pasado 2020.

El extremo brasileño de 23 años, que habitualmente se desempeña por la izquierda pero puede hacerlo también en la diestra, era una de las alternativas que Monchi barajaba para reforzar las bandas del equipo de Lopetegui de cara a esta temporada, pero su club, el Gremio de Porto Alegre, no le dejaba salir por menos de 20 millones de euros y acabó llegando Idrissi por 12 kilos, lo que no borró a Pepê de la lista de futuribles del isleño.

Paralelamente, desde Brasil se viene anunciando en los últimos meses la fuerte competencia del Zenit de San Petersburgo y el Oporto, al tiempo que el Gremio desmentía una oferta del Real Madrid. Y finalmente, parece que es el club portugués el que se llevará el gato al agua, cifrando algunos medios el acuerdo en 15 kilos más un 15% de una futura venta, si bien aún no está claro si el traspaso se acabará concretando en este enero o ya el próximo verano.

Al respecto se ha referido el presidente del club de Porto Alegre, Romildo Bolzan Jr., aunque sin hablar en concreto del Oporto: “En cuanto a la situación del representante de Pepê, es una persona que se relaciona con Gremio, que se relaciona bien. Estamos ante una negociación, sí, y es uno de los responsables de esta negociación, que pretendemos concluir y anunciar en el momento oportuno si se dan las cosas”, señaló.

De este modo, además, el dirigente defendía el papel del representante del jugador en todo este asunto, después de que el entrenador del equipo, Renato Gaúcho, le acusase de marear a su futbolista y hacer que bajara su rendimiento en el campo al ser cuestionado por su futuro: “Esa era una pregunta que se le podía hacer al agente de Pepê. Nos estaba ayudando, haciendo goles y grandes exhibiciones. Luego empezó a hablar de propuestas de Europa y pasó lo que pasó”.