El canterano Antoñito repasó en los medios del club su trayectoria en el Sevilla, con momentos como cuando Manolo Jiménez le comunicó que iba con el primer equipo: "Me quedo con muchas cosas, con la previa cuando Jiménez me llama. Recuerdo que estaba con mis amigos para ir de compras. Me dijo que me tenía que incorporar con el primer equipo y que seguramente jugaría. Me puse muy nervioso, dejé todo lo que estaba haciendo, y mis amigos imagínate, muchos de ellos sevillistas. Era lo que había soñado después de jugar en la Regional Preferente y era la ilusión más grande".
Igualmente rememoró su etapa en el filial, donde brilló. "Ese fue el año que baja el filial y se hace una remodelación de la plantilla. Manolo confió en mi desde primera hora y coincidí con Reyes, que era el baluarte de aquel equipo. Con mirarnos ya nos bastaba y tuve la suerte de debutar luego también con él. Ahí se pusieron los pilares en la cantera de lo que luego se ha disfrutado".
También reconoció que se quedó con la espinita de no estar en el Sevilla de los títulos, pues se marchó al Racing en busca de más minutos. "El año del Racing fue muy bueno para mí. Viví Eindhoven como un aficionado más, pero como estaba cedido pude disfrutar con los compañeros luego en el hotel. Jugar aquel partido le hubiera gustado a cualquier canterano, pero el fútbol son etapas y ese año quería jugar más, porque llegaron Saviola, Kanouté y Luis Fabiano. Si hubiese sido más egoísta habría disfrutado de aquello, pero era muy joven y quería tener minutos", señaló el de San Pablo.