'No es el mismo', 'Ha vuelto cambiado'... son algunas de las conclusiones que sacan aquellos que tienen que sentarse con
Monchi a negociar en su retorno a
Nervión como director general deportivo del
Sevilla FC. Y es que el propio isleño ya ha indicado públicamente que viene mucho más maduro tanto en lo personal como en lo profesional, tras su particular 'erasmus' en
Roma a lo largo de dos temporadas.
Más frío, y dejando a un lado lo temperamental, el de San Fernando está más decidido que nunca en formar un plantel ganador que aspire a lo más alto y que, también, goce de "gen sevillista". Para ello, se ha rodeado de sus hombres de confianza y en sus planes entran canteranos de renombre como
Luis Alberto y
José Gómez Campaña, quien han acabado haciéndose a sí mismos lejos de
Nervión, llegando a ser los futbolistas que se les presuponía ser en la carretera de
Utrera y que, por una u otra cuestión, no consiguieron alcanzar defendiendo la elástica del
Sevilla FC con el primer equipo.
Unos objetivos que, lógicamente, no son fáciles, ni baratos, gozando
Campaña de una cláusula de rescisión de
60 millones de euros (y el compromiso del Levante de dejarlo salir por una oferta inferior tras renovar hace varias semanas) y solicitando la
Lazio más de 30 millones de euros por el vallense
Luis Alberto. De ahí que el de San Fernando, en su nueva vuelta de tuerca en esta segunda etapa como director deportivo sevillista, haya puesto a prueba su método a la hora de negociar, ese que ha perfeccionado, pero que no ha mutado, siendo tantos los éxitos que le ha brindado hasta la fecha.
No existe un único método de negociación, pero así explica Álvaro Torres, agente y amigo personal de Monchi, en el libro
'El Método Monchi', una de las fórmulas habituales del de San Fernando a la hora de comenzar a trabajar en un futbolista.
Unas palabras que vieron la luz por primera vez hace dos temporadas, justo en el verano en el que el isleño emigraba a la
Roma, y que hoy cobran una especial relevancia, teniendo en cuenta que Álvaro Torres, también, es el representante de
Luis Alberto, uno de los objetivos sevillistas este verano: "Lo habitual es que Monchi reciba mucha información de la situación del jugador a través del representante del mismo futbolista. Los agentes somos los mayores nutrientes de información de un director deportivo. Con esta gestión,
Monchi conoce cómo podría armarse una hipotética operación con su jugador y el club dueño de sus derechos... A través del contacto con el agente, puede saber si un determinado fichaje es viable o no en parámetros económicos para el Sevilla. Si supera esa criba, pasa a sentarse y negociar con los clubes".
Y precisamente ahí están las operaciones de los dos canteranos, deseando tanto
Luis Alberto como
Campaña recalar en Nervión de nuevo. Las diferencias económicas entre los clubes, pese a ello, son importantes, especialmente con la
Lazio.
En el caso de
Campaña, Monchi no descarta incluir a algún transferible en la operación para abaratar el coste (lo tasan en unos 20 kilos).