José Antonio Rivero3 min lecturaLa atleta venezolana Yulimar Rojas ha demostrado una vez más su dominio en el triple salto al proclamarse campeona del mundo en Budapest. Su último intento, que alcanzó los 15.08 metros, la coronó como la campeona por cuarta vez en esta disciplina, consolidándose como la atleta más laureada en la historia de los Mundiales en esta especialidad.
En el Centro Nacional de Atletismo de Budapest, el público abarrotó las gradas para apoyar a Yulimar, quien contó con el respaldo de los aplausos unánimes cada vez que realizaba un salto.
A pesar de las dificultades iniciales, Rojas confirmó su favoritismo en el último salto, jugándoselo todo en ese momento crucial. Sus tres intentos anteriores habían sido nulos, lo que aumentó la tensión en la competición.
El primer intento fue anulado, en el segundo logró un salto de 14.33 metros y en el tercero se quedó en 14.26. Los cuarto y quinto saltos también fueron nulos, dejando el desenlace para su último intento.
Antes de ese salto crucial, Yulimar levantó los brazos buscando el apoyo del público. Luego, se giró de espaldas al foso, realizó sus rituales con los brazos y se concentró para lograr un salto seguro. Su objetivo era superar los 15 metros de la ucraniana Maryna Bekh-Romanchuk, quien había liderado la competición con esa marca.
Tras caer en la arena del foso, Yulimar se levantó con una expresión de alivio en su rostro. Cuando el marcador electrónico mostró los 15.08 metros, marcando su discreta marca, respiró aliviada. Aunque el oro parecía seguro, aún tuvo que esperar unos minutos para asegurarse la victoria mientras sus rivales realizaban sus últimos intentos.
El podio estuvo compuesto por Yulimar Rojas en el primer puesto, Maryna Bekh-Romanchuk en la segunda posición y la joven cubana Leyanis Pérez en el tercer lugar, logrando su primer podio en un Mundial a sus 21 años.
Con esta victoria, Yulimar Rojas, quien también es campeona olímpica en Tokio 2020, acumula cuatro títulos mundiales en el triple salto. Además, se convierte en una figura destacada en la historia de los Mundiales de Atletismo desde que esta disciplina se introdujo en el programa en 1993.
Otra competidora cubana, Liadagmis Povea, finalizó en la sexta posición, luego de haber alcanzado el quinto lugar en los Juegos Olímpicos de Tokio.
"Siempre he creído en mi. Para mi no hay techo, no hay barreras. Es verdad que no me encontré bien técnicamente y psicológicamente sufrí. No lo entiendo pero sabía que lo tenía. Sabía que estaba bien físicamente pero tenía que luchar con la Yulimar que tenía dentro y no sacaba. Sentí que el público intentó ayudarme mucho y fue magnífico", dijo Yulimar tras conseguir su cuarto título mundial.