Francisco Salas4 min lecturaLa nueva oleada joven de los Hispanos tras el bronce olímpico ya es una realidad, y aunque los resultados de la generación dorada han sido, aún en los últimos años, muy destacados, hay unos juniors de oro que llaman a la puerta por detrás y eso se ha podido palpar en el el estreno de la selección en la fase de clasificación para el Europeo de 2026, donde aún sufriendo han sido capaces de ganar a Italia. Además, ha sido un partido muy especial, pues se ha jugado en Valencia, más concretamente en el Puerto de Sagunto, y ha servido para ayudar a la víctimas de la DANA.
España superó a los transalpinos con una sufrida y trabajada remontada en el tramo final de un encuentro que fue desde el primer minuto trepidante, con un ritmo muy rápido, lo que beneficiaba a los italianos, sobre el papel bastante inferiores. De hecho, los primeros protagonistas fueron Rodrigo Corrales y Domenico Ebner con dos grandes paradas en las dos primeras jugadas. Garciandia marcó el primer gol para los ‘Hispanos’, que pronto se vieron por detrás en el marcador. Mientras el equipo español, cargado de novedades en su lista, trabajaba cada ataque, los italianos entraban con facilidad.
El equipo de Riccardo Trinilli conectaba a la perfección con Sontacchi y Bortoli, quiénes ponían en aprietos desde el pivote y el extremo derecho a España, que logró volver a ponerse por delante en el partido por 5-4, aunque duró poco. Pese a que Italia parecía tambalearse cuando mejor estaba y fallaba en los envíos en largo a sus atacantes, los visitantes se mantenían por delante. Ante las malas sensaciones, Jordi Ribera pidió tiempo muerto para rearmar al equipo y los ‘Hispanos’ mejoraron sostenidos por Corrales, que paró un penalti, y Dani Fernández, que empató el choque a 9.
Pero la falta de acierto en ataque y la variedad de recursos de Italia fueron en ese punto insuperables para el equipo español, que terminó el primer tiempo por detrás (15-17). Tras el descanso, el partido siguió igual. A Italia le salía todo, a España nada. Los ‘Hispanos’ se desesperaban con el juego de Italia, que llevó el partido a donde quería con un gran acierto en ataque y una buena presión en defensa que les mantenía distanciados a dos goles, pero apareció Odriozola para guiar al equipo con tres tantos. España aprovechó dos exclusiones simultáneas de Italia para recortar distancias.
En el minuto 45 consiguió empatar a 23 y cinco minutos después se puso por delante después de una parada de Sergey Hernández que culminó con un contraataque Dani Fernández (25-24). El partido se igualó y los últimos cinco minutos fueron muy intensos. Los casi tres mil aficionados del Puerto de Sagunto se encargaron de llevar en volandas al equipo, y no pararon de animar, aprovechando que no veían jugar a la selección masculina en su municipio desde 1985. Y gracias a eso España mostró su garra característica y se puso hasta dos goles por delante en un partido que terminó con un marcador de 31-30.